Reconstruyen la tumba del perro abandonado
La tumba del perro que fue abandonado en la zona de San Isidro, en Breña Alta, y que ha sido destruida por unos desalmados en dos ocasiones, ha vuelto a ser reconstruida este miércoles por unos vecinos que pretenden que el humilde 'monumento' que levantaron sea un homenaje a todos los animales que son maltratados por los humanos y dejados a su suerte.
El podenco murió de hambre en la zona conocida por Curva de la Muerte unos días después de que su dueño lo abandonara. El animal fue enterrado en el mismo lugar en el que dejó de existir y en su tumba se levantó un sencillo 'monumento' de madera y piedras que ha sido ya destrozado dos veces.
En el humilde 'panteón', los vecinos han añadido esta vez un cartel del perro aún con vida, pero ya desnutrido, con la leyenda 'Mi lápida en honor a los animales abandonados o maltratados por el hombre molesta solo a la gente que se siente culpable'. Esperemos que la tumba del desdichado podenco no vuelva ser profanada por individuos crueles y despreciables. También los animales tienen derecho a descansar en paz.
