Bermúdez acepta la dimisión del gerente de Urbanismo
José Manuel Bermúdez, ha aceptado la dimisión del gerente de Urbanismo “heredado” de Miguel Zerolo, Eduardo Risueño, aunque el alcalde de Santa Cruz de Tenerife enmarcó esta renuncia dentro de las polémicas suscitada en torno al discutido Plan General de Ordenación Urbana de la ciudad, sin referencia a posibles tratos de favores ni a la imputación de Risueño en el caso Parque Marítimo, por posibles presiones a funcionarios.
Esta noticia, y el aplazamiento anunciado por tres meses para la aprobación del Plan General de Ordenación Urbana centraron el contenido de la junta extraordinaria de portavoces, convocada urgentemente para la tarde de este jueves por el alcalde.
La dimisión de Risueño, pedida hace semanas por el concejal de XTF José Manuel Corrales, fue dada a conocer en una rueda de prensa para aclarar, de una vez, en qué punto se encuentra la tramitación del PGO, que en principio se iba a aprobar el 23 de junio con la intención de solicitar luego a la COTMAC la suspensión de los puntos más conflictivos.
Bermúdez sostuvo que la dimisión de Eduardo Risueño ha sido aceptada por las circunstancias que rodean al PGO, sin mención alguna a tratos de favores o de posibles presiones a funcionarios para dictaminar a favor de la aprobación del Plan en su actual redacción, y afirmó que la marcha del gerente servirá para “la mejora y modernización de la estructura organizativa de la Gerencia”.
Risueño esta imputado junto con el concejal Luis Prieto por posibles tratos de favor en 2009 relacionados con el Parque Marítimo, pero según Corrales y el portavoz de la Plataforma No a este PGO, Felipe Campos, el ya ex gerente debía haber sido destituido al inicio de esta legislatura por su intervención en la elaboración del PGO, ahora revisionado, durante los tres últimos años de la etapa Zerolo.
Correcciones ortográficas
En la misma comparecencia, el alcalde explicó que se va a solicitar una verificación del documento que fue revisado para subsanar los 45 reparos detectados por la COTMAC en junio de 2011, ya que “se han producido cambios en el documento” al margen de esas subsanaciones. Por ese motivo, anunció que se solicitará al servicio de Planeamiento y Gestión de la Gerencia Municipal de Urbanismo que se revise al completo el texto “para mayor garantía de la transparencia y garantía jurídica”.
Y es que se han detectado cambios en el documento ya revisado, en el capítulo de “subsanaciones e informes” que se van a analizar, pero el equipo redactor asegura que se trata de “correcciones ortográficas, erratas de redacción de estilo, y de edición e impresión de los documentos”, por lo que hasta que no se revise el texto para comprobar esos cambios, no será llevado al Consejo Rector de Urbanismo.
Bermúdez, con el respaldo del concejal de Urbanismo José Ángel Martín, sostuvo que el PGO no está caducado “respetando opiniones y dictámenes de parte”, sino que el plazo dado por la COTMAC finaliza el 3 de julio y, aún así, se podría pedir una prórroga de otros tres meses, aunque la intención es que el texto se apruebe antes..
En esa legalidad se reafirman la Gerencia de Urbanismo y la Secretaría Municipal del Ayuntamiento, al igual que cabe legalmente aprobar el Plan y “solicitar justificadamente la suspensión de aquellos ámbitos más controvertidos”, sobre todo, el fuera de ordenación en que quedarían 80.000 familias.