Canarias celebra la Mesa del Taxi con el instrusismo como principal problema a resolver
El vicepresidente y consejero de Obras Públicas y Transportes del Gobierno de Canarias, Pablo Rodríguez, ha presidido este viernes la Mesa del Taxi -órgano sectorial de la Mesa del Transporte Terrestre- con el instrusismo como principal problema a resolver.
“Hay una reivindicación desde hace mucho tiempo para controlar ese intrusismo existente en algunas zonas, principalmente turísticas”, dijo el responsable regional antes la celebración de la reunión en Las Palmas de Gran Canaria.
Asimismo, Rodríguez declaró que el Gobierno de Canarias va a dar cobertura a la demandas del sector buscando la manera de evitar cualquier posibilidad de instrusismo.
“Existen lagunas en la actual normativa que imposibilitan determinadas actuaciones o controles que son necesarias. Hay instrusismo en las zonas turísticas o en algunos aeropuertos y en ese ámbito vamos a trabajar”, aseveró.
Modernización del sector del taxi
Del mismo modo, la Mesa del Taxi también ha puesto encima de mesa la modernización del sector. “Estamos hablando de que cada existen mayores competidores al taxi y tenemos que buscar la manera de que el sector sea cada vez más competitivo”, apostilló.
Con este fin, el consejero recordó que su área apuesta por la modernización del sector para que esté más vinculado a las nuevas tecnologías y a todo lo relacionado con la comunicación para que el usuario tenga cada vez una experiencia mejor.
Los taxistas, cansados de “buenas palabras”
Por su parte, el presidente de la Federación Regional de Taxi de Canarias (Fedetax), Juan Artiles, comentó que el instrusismo es el principal problema que tienen en la actualidad los taxistas, para expresar que están cansados de “buenas palabras” mientras la situación persiste.
“El impacto en el sector del intrusismo puede llegar a ser del 60% de la recaudación de los taxis en la tarifa de transporte interurbano. Estamos hablando de un importe enorme de dinero que va a parar a determinadas personas que unas trabajan de forma medio legal y la mayoría de forma alegal”, denunció.
En este sentido, Artiles incidió en que han informado de esta situación tanto a cabildos como a ayuntamientos y que, hasta ahora, se han llevado a cabo algunas acciones aunque lo que más reciben son “buenas palabras”.
“Y lo que queremos decirle a la administración -continuó- es que estamos cansados de buenas palabras y que lo que queremos son acciones contundentes”.
