La oposición insular dice que no se retirará el vallado del Castillo de la Luz
“Cuando todos pensábamos que ésta era un valla de obra, resulta que es la valla que va a tener de por vida el Castillo, un BIC que forma parte del catálogo nacional de este país, y que apenas puede verse. Lo que mejor se ve es la azotea, y encima han puesto otro andamiaje de acero corten para el tema del ascensor. ¿Qué castillo vamos a ver? ¿Vamos a ver el castillo o la valla? Se han cargado el Castillo de la Luz”. Así de contundente se mostró el consejero socialista, José Antonio Godoy, que criticó en la Comisión del Pleno de Cultura el vallado exterior y la infraestructura en la parte superior de acero corten, que esconden el Castillo de la Luz, en Las Palmas de Gran Canaria.
Godoy preguntó al Gobierno insular si la colocación de la valla cuenta con los informes favorables de Patrimonio Histórico del Cabildo de Gran Canaria, que han permitido colocar dichas estructuras.
La portavoz Carolina Darias y el consejero José Antonio Godoy visitaron hoy el Castillo de la Luz, y pudieron comprobar in situ que el vallado que se ha colocado bordeando este Monumento produce un impacto visual grave, ya que tapa la mitad del mismo.
Godoy recordó en comisión que según el Decreto de 12 de julio de 1941, publicado en el (BOE 26/07/1941), el llamado Castillo de La Luz o de Las Isletas fue declarado Monumento Histórico-Artístico en base a la Ley del Tesoro Artístico del año 1933, entonces vigente, con los informes favorables de la Real Academia de la Historia y de la Comisaría General del Servicio de Defensa del Patrimonio Artístico Nacional, a propuesta del Ministro de Educación Nacional y previa deliberación del Consejo de Ministros, razones por las que, además de estar contemplado en el catálogo de Bienes de Interés Cultural de la Comunidad Autónoma de Canarias, también lo está en el catálogo Nacional en la categoría de monumento histórico.
El B.O.E. mencionado recoge una breve reseña de las razones argumentadas para tal distinción: “Emplazado en una pequeña península situada al noroeste de la ciudad de Las Palmas (Gran Canaria), tiene un valor histórico extraordinario pues pertenece al grupo de fortificaciones levantadas a raíz de la definitiva incorporación de la isla a la Corona de Castilla en mil cuatrocientos ochenta y tres, para defenderla de los frecuentes y continuos ataques a aquellas islas, explicables por la riqueza de su suelo y su posición geográfica. Estos ataques tuvieron verdadera importancia, principalmente en el siglo XVI, y en ellos el Catillo de La Luz, defendido con heroicidad, desempeñó un papel brillantísimo”.
“Setenta y dos años después de su declaración como Monumento Histórico- Artístico y tras breves períodos de uso relacionado con la actividad cultural, bastantes años de inactividad y muchos de reformas, contrarreformas y restauraciones, han hecho que el Castillo de La Luz continúe cerrado al público hasta nuestros días”, aseveró Godoy.
La última polémica en relación con dicho monumento aparece como consecuencia de la colocación de una valla compacta de acero corten de 2'15 metros de altura, en el perímetro exterior del BIC “que no permite contemplar el monumento en su conjunto y de una infraestructura en la parte superior del monumento- supuestamente de acero corten también- visible desde la zona ajardinada y, supuestamente, relacionada con la instalación de un ascensor”, informó Godoy.
Asimismo, recordó que la Ley de Patrimonio Histórico de Canarias en su Artículo 26, Delimitación y entorno de protección recoge que a los efectos de esta Ley, se entiende por entorno de protección la zona periférica, exterior y continua al inmueble cuya delimitación se realiza a fin de prevenir, evitar o reducir un impacto negativo de obras, actividades o usos que repercutan en el bien a proteger, en su contemplación, estudio o apreciación de los valores del mismo.