A pleno con el isloñetismo

Ana Tristán / Ana Tristán

El pleno del Cabildo de Gran Canaria celebrado este viernes fue una sesión interminable. Se prolongó desde las diez de la mañana hasta las seis de la tarde, y estuvo cargado de momentos de crispación y nerviosismo.

Tras varios acuerdos por unanimidad en cuestiones de índole presupuestario y de créditos, se llegó pronto a un tema peliagudo, como fue la modificación de la plantilla de personal funcionario de la Corporación, propuesta por el Partido Popular. Tanto el Partido Socialista como el grupo Mixto criticaron esta moción por la incoherencia, en un ambiente de recortes al funcionariado, de modificaciones que impliquen “un incremento salarial de más de 4.000 euros” y, sobre todo, por la situación de imputado en el caso Eolo de uno de los beneficiarios de esta modificación retributiva.

Según la portavoz socialista, Carolina Darias, el aumento del sueldo a Celso Perdomo “alimenta la idea de que a la clase política le resbala la ética” y la situación que están padeciendo los ciudadanos. Finalmente, fue aprobada por dieciséis votos populares frente a trece de la oposición.

La campaña iniciada por el PP Por Gran Canaria, sí podemos levantó una reacción explosiva en la oposición. Entre calificaciones de “panfletarios y partidistas”, se acusó al partido del gobierno de tratar de ocultar con la operación al verdadero corresponsable de esos supuestos perjuicios a Gran Canaria: el mismo Partido Popular.

Con esto y con todo, quedó sin aclararse el coste de la campaña, ni la composición de la plataforma cívica que la promueve, que no tiene miembros ni documentos constitutivos, ni se les espera. Ya que, según afirmó José Miguel Bravo de Laguna, “la asamblea son todos o nadie, es un movimiento ciudadano impulsado por el Cabildo, ¿quién lo va a impulsar, Coca Cola o El Corte inglés?”.

Para la portavoz socialista, Carolina Darias, el PP debería dar cuenta del coste de esta campaña, ya que “la mayoría absoluta no es poder absoluto, y el Cabildo no es su finca privada”. Tras esta campaña que fue tildada de isloteñista, se aprobó por unanimidad la moción para el respeto de la capitalidad compartida y el estricto cumplimiento de la ley de sedes.

El Partido Socialista presentó una moción para corregir las agresiones perpetradas contra Canarias en los Presupuestos Generales del Estado de los años 2012 y 2013, elaborados por el Partido Popular de Mariano Rajoy. Sin embargo, únicamente el grupo Mixto la apoyó, con lo que no llegó a aprobarse con 13 votos a favor y 16 en contra.

Tras una dura pugna a ver quién era el más grancanario e insularista, o quién lo era desde antes y quién desde después, y tras varias mociones a propuesta del PSC-PSOE que no prosperaron, se puso en la mesa la moción presentada por el tránsfuga Juan Domínguez: promover el uso de la piedra natural autóctona en las obras públicas de Gran Canaria. Asunto que, salvo alguna coma o punto y coma, fue aprobado por todos.

“Si te parece hacemos una recolecta”

Y llegamos a la polémica de Infecar. Para los populares, la fusión de la Institución Ferial de Canarias con la Sociedad de Promoción Económica de Gran Canaria (SPEGC) es una forma de aunar la ciudad empresarial y el parque tecnológico para “simplificar las cosas”, reduciendo costes y estructuras en estos momentos de crisis. Asunto que formó notable revuelo, para seguir la tónica de la tarde.

No gustó al portavoz de NC, Carmelo Ramírez, que el presidente Bravo de Laguna presumiese de que su partido fue el que logró el saneamiento de la entidad, ya que para el nacionalista fue posible sólo porque “cogieron un millón del fondo del Cabildo”, ante lo que Bravo de Laguna respondió con sorna por lo bajini: “No, si te parece hacemos una recolecta entre nosotros”.

Tras varias horas de alta tensión, y algún conato de infarto, o casi, se llegó a uno de los temas más polémicos: la iniciativa legislativa para la modificación de la Ley de modernización turística de Canarias (2/2013), que ha generado un amplio rechazo en Gran Canaria, especialmente por la prohibición de otorgar nuevas autorizaciones previas para hoteles de cuatro estrellas. Lo que tanto para NC como para el PP perjudica gravemente a Gran Canaria, y ante lo que habría que dejar las diferencias a un lado y constituir una mesa de trabajo que incluyera a grupos políticos, sindicatos y empresarios en la redacción de una propuesta de iniciativa legislativa que se remitiera posteriormente al Parlamento de Canarias. El PSC votó en contra en esta ocasión y CC se abstuvo.

No obstante, se volvieron a poner de acuerdo para apoyar la medida propuesta por Nueva Canarias en relación a establecer medidas específicas a favor del sector agrícola. De este modo, se aprobó la modificación del Régimen Específico de Abastecimiento (REA) y el aumento de las ayudas al sector primario regional, para promover el empleo y la producción agraria y ganadera. Tomando partido por los agricultores y ganaderos frente a “las grandes corporaciones dedicadas a la importación que son las que están captando estas ayudas”, como afirmó Román Rodríguez.

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