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El PP canario se olvida de las derrotas judiciales de Soria y lo califica como un político “honesto”

El ministro de Industria, Energía y Turismo y presidente del Partido Popular (PP) de Canarias, José Manuel Soria (d) junto a Asier Antona (i). (Efe/Cristóbal García).

Canarias Ahora

Las Palmas de Gran Canaria —

El secretario general del PP de Canarias, Asier Antona, ha asegurado este viernes, a propósito de las polémicas vacaciones de José Manuel Soria en el hotel Breathless Punta Cana Spa & Resort de la República Dominicana, que confía “plenamente” en la honestidad del ministro de Industria, Turismo y Comercio y presidente de los populares de Canarias.

“Tengo plena confianza en mi presidente, porque le conozco muy bien. Él ha aclarado lo que tenía que aclarar y lo ha puesto en manos de la justicia por calumnias. Nada más tengo que decir. Soria ha estado sometido durante mucho tiempo a un pim, pam, pum injusto en el que los tribunales le han ido dando la razón siempre”. Antona respondía así, en una entrevista en el programa de 7.7 Radio Nada que ver, a la información publicada por este medio sobre la estancia del ministro en la suite presidencial del hotel del empresario canario Enrique Martinón en Punta Cana, donde dice que pagó 70 euros por noche cuando el precio de la habitación oscila entre los 1.300 y los 1.500 euros.

Lo cierto es que los tribunales no siempre han dado la razón al actual ministro de Industria. De hecho, de las cuatro querellas que Soria ha interpuesto contra el autor de la información del viaje a Punta Cana, Carlos Sosa, director de Canarias Ahora, ha perdido tres.

Soria pidió dos años de cárcel y 1,5 millones de euros de indemnización para los dos periodistas, uno de ellos Sosa, que habían publicado y divulgado las informaciones del denominado caso chalet. El entonces presidente del Cabildo de Gran Canaria vivió durante 21 meses en una casa propiedad del empresario Javier Esquivel, que durante esas fechas proyectaba la instalación de megaturbinas eólicas en el muelle de Arinaga (Agüimes), para lo cual era necesario que Soria desde el Cabildo hiciera decaer un proyecto público y, en compañía de su hermano Luis, consejero de Industria del Gobierno canario, consiguiera la concesión en la Autoridad Portuaria de Las Palmas, en cuyo consejo de administración ambos eran vocales.

En el juicio Soria presentó unos recibos manuscritos con los que intentó justificar que pagaba 1.600 euros al mes por el alquiler de la casa. La juez calificó estos recibos, que no tenían membrete ni cuño, de “pintorescos”. Además, ese dinero no figuraba en la contabilidad oficial de la empresa propietaria del chalet. Finalmente, los periodistas fueron absueltos.

La misma suerte corrió la querella de Soria contra Sosa por el denominado caso Isolux. Durante su etapa como alcalde de Las Palmas de Gran Canaria, el ahora ministro dejó encarrilada la adjudicación del concurso de membranas para potabilizadoras a la empresa Isolux, cuya oferta había quedado la novena en el concurso público convocado. Su sucesora en el cargo, Josefa Luzardo, también del PP, acabaría encargando un informe a un técnico del servicio de recogida de basuras para que la oferta de Isolux quedara primera.

En el juicio de este caso declaró, a propuesta de la defensa del periodista, el representante de la empresa que inicialmente había ganado el concurso, con el que Soria siempre había tenido buenas relaciones. En sede judicial, manifestó que el ahora ministro le dijo delante de varios testigos que debía retirar el recurso que había interpuesto contra la adjudicación a Isolux porque de lo contrario su empresa no volvería “a trabajar más en Gran Canaria”.

A raíz de esta declaración, y tras la absolución del periodista, Soria presentó una nueva querella por el delito de presentación de testigo falso a juicio. En este caso, ni siquiera llegó a juicio, ya que fue archivada en fase de instrucción.

La única querella que le ha ganado Soria al director de Canarias Ahora es la del denominado caso La Favorita. El periodista fue condenado a pagarle una indemnización de 4.000 euros y una multa de 21.000 por un delito de calumnias tras publicar que, siendo Soria alcalde, el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria compró una vieja fábrica tabaquera a un empresario por casi tres veces su valor de mercado. La clave de la condena estuvo en una de las informaciones publicadas, que hacía referencia a una cuenta en Suiza de la que era titular la inmobiliaria que ejerció de intermediaria y a un viaje realizado por esas fechas por el concejal de Hacienda a ese país.

En la entrevista de este viernes en 7.7 Radio, Antona también dijo que el PP va a “seguir trabajando intensamente” y aseveró que Soria es un “gran ministro canario” que “defiende a capa y espada la situación” del archipiélago. “Debemos estar orgullosos de seguir teniendo a Soria al frente de ese ministerio tan importante para Canarias”, concluyó.

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