El Cabildo de Fuerteventura declara la situación de emergencia humanitaria por la llegada de menores inmigrantes
El Pleno del Cabildo majorero ha aprobado este jueves por mayoría declarar la situación de emergencia humanitaria ante la llegada de menores inmigrantes a Canarias a fin de ampliar la oferta de plazas para acogerles y responder a la necesidad de atender a los que han arribado en las últimas semanas.
La corporación considera conveniente esta declaración, además, a fin de “estar preparados para hacer frente a la previsible llegada de más”, según argumenta en un comunicado donde informa de la iniciativa, a la vez que insta al Gobierno regional y a la Administración General del Estado a “adoptar medidas urgentes para paliar la situación”.
En la nota se relata que el pasado día 27 arribaron a la isla majorera 11 personas que se declararon menores, y se insiste en que, “en previsión de posibles nuevas llegadas y dada la complejidad del procedimiento administrativo para tomar decisiones rápidas”, el Pleno ha creído “imprescindible” declarar la situación de emergencia humanitaria.
Un recurso administrativo que, con una vigencia de 90 días, permite contratar por vía de urgencia todo lo necesario para atenderlos, posibilitando que se pongan los medios y servicios adecuados, destaca la nota.
En ella, la consejera de Bienestar Social insular, Rosa Delia Rodríguez, expone que ha actualizado las cifras de menores no acompañados en Fuerteventura, 28 en total desde el pasado 27 de octubre, una cantidad que supera el cupo de acogida de 24 que el Gobierno de Canarias asignara a la isla en el año 2002.
Y añade que la red de centros de atención al menor de la isla, gestionada por la asociación solidaria Mundo Nuevo, ofrece 40 plazas, pero tras la llegada de la última patera hubo que afrontar la acogida inmediata de 12 personas, lo que provocó su sobreocupación, llegando a albergar a 49.
Ante esta situación, Rodríguez argumenta que se “deben tener las herramientas que nos permitan atenderles bien, sea un menor o sean cien”, y ha señalado que “hay que ser previsores, porque en cualquier momento nos puede ocurrir lo de la isla vecina”, Lanzarote.
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