Conmoción en la comunidad educativa del Felo Monzón por la muerte de la profesora María Eugenia Pérez
La comunidad educativa del IES Felo Monzón reaccionó como una verdadera piña. Tanto el jueves, cuando se conoció la desaparición de la profesora María Eugenia Pérez Sánchez, como en la jornada de este viernes. El claustro de profesores participó de manera activa en la batida que, desde las puertas del propio centro educativo, peinó los alrededores de un instituto a la expectativa. Cuando se conoció la triste noticia del fallecimiento de la docente, cuyo cuerpo fue localizado muy cerca del lugar dónde se la vio por última vez: las inmediaciones del propio centro educativo del barrio de Lomo Blanco.
A primera hora de la mañana, un operativo formado por ocho voluntarios del Grupo de Intervención Operativo de Rescate y Salvamento (GIORS), agentes de las fuerzas de orden público, bomberos y miembros del profesorado del propio centro participaron en una batida por las inmediaciones del centro, situado en una de las márgenes del Barranco del Guiniguada, ayudados por perros.
Poco después se conocía la triste noticia: “Desactivada la búsqueda de María Eugenia, desgraciadamente ya apareció su cuerpo sin vida”, se escribía en un chat de emergencias de uso interno de los medios de salvamento insulares.
El cuerpo sin vida de María Eugenia Pérez apareció en un barranco muy cerca del instituto. Muy cerca de una zona con gran desnivel de altura y peñascos. El Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Canarias ya inició las tareas de investigación pertinentes y las causas del deceso son, por el momento, desconocidas. La reacción, en el centro educativo, es de estupor.
“Todavía no nos lo creemos. Era una buena profesora muy comprometida con su labor y muy trabajadora. Es una pérdida muy grande para un centro como el nuestro”, señaló a Canarias Ahora uno de los docentes. Los profesores decidieron suspender las actividades de la jornada y mantener cerradas las puertas del instituto. Desde el propio centro educativo se agradecía “a toda la comunidad educativa por el esfuerzo para encontrarla”. El claustro está “destrozado” por la noticia.
El suceso ha provocado la reacción de otros docentes a lo largo y ancho de la geografía canaria que han mandado sus condolencias a la comunidad educativa del centro grancanario y a la familia y amigos de la profesora a través de las redes sociales.
