Neuronas jóvenes y funcionalmente sanas pueden reparar los circuitos del cerebro enfermo
MADRID, 25 (EUROPA PRESS)
Investigadores de la Universidad de Harvard, el Hospital General de Massachusetts, el Centro Médico Beth Israel Deaconess y la Escuela Médica de Harvard, han llevado a cabo trasplantes de neuronas embrionarias en una fase selecta de su desarrollo en el hipotálamo de ratones incapaces de responder a la leptina, una hormona que regula el metabolismo y el control del peso corporal.
Estos ratones mutantes suelen ser obesos mórbidos, pero el trasplante de neuronas reparó los circuitos cerebrales defectuosos, permitiendo a los animales responder a la leptina y ganar mucho menos peso. Los resultados de la investigación han sido publicados en la revista 'Science'.
La reparación en el nivel celular del hipotálamo - una región crítica y compleja del cerebro que regula fenómenos como el hambre, el metabolismo, la temperatura corporal y comportamientos básicos, como el sexo y la agresión - indica la posibilidad de nuevos enfoques terapéuticos para condiciones de mayor nivel como la lesión de médula espinal, el autismo, la epilepsia, la esclerosis lateral amiotrófica (enfermedad de Lou Gehrig), la enfermedad de Parkinson y la enfermedad de Huntington.
“Sólo hay dos áreas del cerebro conocidas que se someten normalmente al reemplazo neuronal durante la edad adulta a nivel celular - la llamada neurogénesis, o nacimiento de nuevas neuronas - el bulbo olfativo y una subregión del hipocampo llamada circunvolución dentada”, explica Jeffrey Macklis, profesor de Biología Regenerativa en Harvard, quien añade que “las neuronas que se añaden durante la edad adulta en ambas regiones son generalmente pequeñas, y se cree que actúan como los controles de volumen de la señalización específica. En nuestro nuevo estudio hemos reconectado circuitos cerebrales dañados que no experimentan naturalmente la neurogénesis, y hemos conseguido restaurar su función normal”.
Para trasplantar las células exactamente en la región correcta y microscópica del hipotálamo, los científicos utilizaron una técnica llamada microscopía de alta resolución por ultrasonidos. Las neuronas sobrevivieron al proceso de trasplante y se desarrollaron estructural, molecular y electrofisiológicamente; además estas nuevas neuronas se integraron funcionalmente en los circuitos, respondiendo a insulina, la leptina, y la glucosa.
Según los investigadores, “el hallazgo de que estas células embrionarias tan eficientes a la hora de integrarse en los circuitos neuronales nativos, arroja esperanza sobre la posibilidad de aplicar técnicas similares para tratar otras enfermedades neurológicas y psiquiátricas”.