El obrero fallecido en Guanarteme no tenía contrato
La consejería de Empleo, Industria y Comercio del Gobierno de Canarias ha informado que la Inspección de Trabajo considera el suceso acaecido el pasado miércoles, en el que un hombre de 32 años pereció tras desplomarse el techo de una vivienda antigua que reparaba en el barrio grancanario de Guanarteme, como un caso “aislado” y ha señalado que la obra no tenía licencia y no disponía de las medidas de seguridad necesarias, y que el fallecido no contaba con contrato.
Sin embargo, el ejecutivo regional indica en un comunicado que hasta que no se consiga la autorización oportuna para entrar al inmueble, los inspectores no conocerán lo que sucedió realmente. Lo que sí constata Trabajo con los primeros datos que se han recibido, es que los trabajos no cumplían con la normativa básica sobre prevención de riesgos laborales. Los inspectores reiteran que este tipo de sucesos “no es frecuente, sino que se producen de forma aislada”.
La directora regional del área, Gloria Gutiérrez, fija el objetivo intensificar los controles para evitar que hechos como este se repitan. Sin embargo, reconoce que al ser una obra en una vivienda “es difícil de vigilar”.
“Empleados y empresarios han de ser responsables para garantizar que sucesos como este dejen de formar parte de las estadísticas de siniestralidad laboral”, puntualiza Gutiérrez.