''Ruina'' en Castro por la rotura de un embalse
La rotura de un embalse de más de 80 años de antigüedad en Granadilla de Abona, que tuvo lugar de madrugada, ha dejado a las dos viviendas más cercanas en estado “ruinoso” y ha afectado a otras cuatro, además de a cinco vehículos, según informa el Ayuntamiento.
El alcalde, Jaime González, que acudió al lugar situado en la zona de Castro, en San Isidro, afirma en un comunicado que se ha prestado apoyo psicológico a los afectados y que la Administración local realojará a las familias que “así lo necesiten y quieran”. Añade que “ahora lo importante son las personas, ofrecerle nuestro apoyo y ayuda, y después vendrán las responsabilidades”.
Al lugar acudieron, la Policía Local, Bomberos Voluntarios de Granadilla, Guardia Civil, Cruz Roja y operarios del área de Servicios y Obras del Consistorio, así como de Unelco, lo que permitió una evacuación rápida, señala la Institución.
Los vecinos relataron a los responsables de la Administración que oyeron un fuerte estruendo, para después ver cómo el agua y el lodo inundaban sus viviendas. “Fue como una pequeña riada, nos cogió de lleno, después tuvimos mucho miedo” afirman los afectados, al tiempo que recuerdan que el pasado día 16 se habían producido algunas filtraciones del embalse, que es de propiedad privada y que se utiliza para el riego de zonas agrícolas.
La mujer de 52 años que fue trasladada al Hospitén Sur con policontusiones de carácter leve se encuentra en casa de su hija, asegura el Ayuntamiento. Su inmueble, sin embargo, “prácticamente ha desaparecido”, por ser el más cercano a la presa.
Los propietarios de la segunda vivienda más afectada lamentan “los daños psicológicos”, y que “aquella era su casa, el esfuerzo de una vida y su trabajo”. Los inmuebles restantes presentaban hoy por la mañana lodo y agua en el suelo.
