Podemos reclama reducir un 25% los sueldos de los directivos de los casinos del Cabildo de Tenerife
El consejero de Podemos en el Cabildo de Tenerife Julio Concepción ha solicitado al consejo de administración de Casinos de Tenerife que los salarios de los altos cargos se reduzcan en un 25 por ciento y que ese “ahorro” se use para aumentar en el 1 por ciento el salario de la plantilla laboral.
En un comunicado, Podemos critica que los sueldos directivos de la sociedad de casinos superen los 450.000 euros, y explica que los salarios de siete altos cargos de los casinos que quiere vender el Cabildo del Tenerife ascienden a 458.696 euros al año, una media de 65.500 euros por persona.
Aunque uno de ellos, el gerente de la sociedad, cobra 79.018 euros brutos anuales, añade Julio Concepción, quien señala que el sueldo medio de las 121 personas que trabajan en casinos es de 29.000 euros brutos, “mucho menos de la mitad de lo que cobran su gerente”.
Para el consejero de Podemos es “indecente que mientras la clase trabajadora va viendo mermados sus ingresos, con una reducción del 27,04 por ciento de gasto de personal desde que empezó la crisis en 2007, y mientras afronta el temor de los despidos o precarización que vendrían de la mano de la privatización de esta empresa pública”, los responsables de la mala gestión que ha llevado a plantear la venta de los casinos “lleguen a cobrar salarios de hasta 79.000 euros”.
Según Julio Concepción, la realidad es que los gastos de personal de esa empresa pública se han recortado en 1,9 millones de euros, que aún no se ha devuelto al personal la paga extra de Navidad de 2012 y que no se les ha aplicado la subida salarial del 1 por ciento aprobada para este año desde el Gobierno central, “y, sin embargo, sus jefes tienen sueldos de absoluta bonanza”.
Sobre los datos económicos de los tres casinos públicos de la isla, señala que cerraron 2015 con casi 500.000 euros de beneficios, “llamativamente, gestionados por siete directivos que nos costaron 458.696 euros”.
Reitera Julio Concepció que el Cabildo de Tenerife “debería descartar la privatización de la sociedad, mejorar su gestión y consolidarla como una importante fuente de empleo y recursos públicos que pudieran aumentar los contratos laborales directos, 121 en la actualidad, y los 80 puestos de trabajo indirecto que genera esta actividad”.
