Bermúdez dice que deja una ciudad en mejores condiciones que la que heredó
El alcalde de Santa Cruz de Tenerife, José Manuel Bermúdez, asegura que dejará el Ayuntamiento “en mejores condiciones” que las que se encontró en 2011 y con unas perspectivas de futuro “muy buenas”.
En un desayuno informativo con representantes de entidades financieras, dijo que tiene la “conciencia muy tranquila” con el trabajo realizado en este mandato para devolver al Ayuntamiento el “liderazgo” de la ciudad, y ha pronosticado el inicio de un nuevo ciclo inversor en el municipio, tanto público como privado.
Bermúdez insistió en que se ha hecho un trabajo “con rigor”, poniendo como ejemplo que en 2011, al llegar a la Alcaldía, no estaban garantizadas las nóminas de los 2.200 trabajadores municipales.
En cifras, el concejal de Hacienda, Alberto Bernabé, detalló que los ingresos este año suben hasta los 217,8 millones, el gasto de personal sigue a la baja (hasta los 29,3 millones), y la inversión pasará de 13 a 22 millones, con una deuda que en cuatro años, ha pasado de 140 millones a 75. “La deuda está aplanada y gestionada”, explicó.
Indicó que el decreto de proveedores puesto en marcha por el Estado fue “bueno”, ya que la deuda de 56 millones en facturas que había hacia las empresas “ha pasado ahora a los bancos”, que, no obstante, va a quedar liquidada la próxima semana con el pago de los últimos siete millones y con siete años de antelación.
Ante las nuevas perspectivas económicas que se avecinan, Bermúdez señaló que el próximo alcalde deberá ser “el mejor comercial de la ciudad” para atraer inversión, gracias en parte al desbloqueo de “asuntos históricos” como la aprobación parcial del PGO o el Plan Especial del Puerto.
En este punto, criticó a algunos candidatos electorales que proponen “levantar el puerto” para hacer playas, ya que eso supone “no conocer la historia de la ciudad”. “Sin el puerto no hubiéramos sido capital de nada”, explicó.
Además, no ha ocultado que la tasa de paro sigue siendo “insoportable” aunque hay una “tendencia” de descenso e incremento de las contrataciones, situación que va a seguir con grandes proyectos como el Parque Científico y Tecnológico de Cuevas Blancas o la instalación de nuevas empresas en la dársena pesquera.
Bernabé prevé un “incremento” de la actividad de la construcción de en la ciudad, favorecido por la bajada de un 55% de Impuesto de Construcciones, que puede llegar hasta el 95% si se contrata a personas en riesgo de exclusión social.
Asimismo, ha valorado que tras el trabajo “de machete” para reordenar las cuentas municipales, ahora se pueda acometer una bajada de impuestos que no está motivada por la cercanía electoral sino que es el “relato coherente” del trabajo realizado desde 2011, que ha permitido que el consistorio cumpla todos los indicadores económico-financieros del Estado y Canarias.
Bermúdez también describió una situación social y política “más pacífica” que cuando accedió en 2011 a la Alcaldía tras la larga etapa de Miguel Zerolo. “Tenía tres acampadas por fuera del Ayuntamiento”, señaló, al tiempo que remarcó los avances de la ciudad como destino turístico, con ocupación hotelera duplicada, más visitantes -es la segunda excursión de la isla tras el Teide- y previsible crecimiento del segmento de cruceros.