Playa de La Arena pierde la bandera azul tras izarla durante 32 años consecutivos

El alcalde de Santiago del Teide, Emilio Navarro, ha responsabilizado a la Consejería regional de Sanidad de la pérdida de las dos banderas azules con las que fueron distinguidas el pasado año dos playas del municipio, la de La Arena y la de Los Guíos, en Los Gigantes. Se da la circunstancia de que La Arena -la más condecorada de Canarias- pierde la bandera azul después de 32 años consecutivos recibiendo ese galardón a la calidad y seguridad de los espacios de baño, todas las ediciones desde que el archipiélago se sumó a este tipo de reconocimiento en 1988. 

El regidor no se conforma con la “justificación” dada por Sanidad sobre la base de una decisión que deja al ayuntamiento sin banderas, esto es, el incumplimiento de la normativa europea en materia de vertidos para quedarse sin banderas. También habla Navarro de “trato discriminatorio” con Santiago del Teide, y subraya que son “muy pocos” los municipios que cumplen con ese criterio regulador, “por lo que no es justo que a playa de La Arena se le aplique ese criterio y a las demás, no”.

Destaca el regidor, a modo de incomprensión, que a pesar de la rotura del emisario por el mal tiempo a finales de 2018 se obtuvo una nueva bandera en 2019. Se congratula además el alcalde que “nunca hemos recibido un acta de cierre de la playa, y la calidad del agua ha sido muy buena y, en muchos casos, excelente”.  

Navarro anuncia que exigirá una explicación urgente y exhaustiva, “si es que la hay”, acerca de la no concesión de las distinciones a las dos playas, para lo cual ha  solicitado una reunión con el consejero de Sanidad del Gobierno de Canarias.

Gestión de las banderas azules

Cuestionada por este asunto, la Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad niega esa responsabilidad atribuida por el alcalde Navarro y enfatiza que la gestión de banderas azules y el otorgamiento o denegación de los galardones compete al tribunal configurado por la Asociación de Educación Ambiental y del Consumidor (ADEAC). 

La ADEAC es una asociación sin ánimo de lucro e independiente del Estado que organiza desde hace tres décadas la entrega de banderas azules a los municipios. 

En el caso de la playa de La Arena, se negó la bandera azul por incumplimiento de la normativa europea en materia de aguas residuales urbanas ( Directiva 91/271/CE), incumplimiento que aparecía recogido en el último informe de seguimiento Cuestionario 2017 (Q2017) del Ministerio de Transición Ecológica.

En la Consejería de Sanidad se reflexiona sobre el disgusto del alcalde y, con diplomacia, se advierte que si bien la solución a los problemas de vertidos apuntados  puede no ser de competencia del Ayuntamiento, tampoco lo es de la Dirección General de Salud Pública. 

Para obtener una bandera azul, los municipios y puertos españoles presentan su candidatura de forma voluntaria y son evaluados por un jurado nacional en el que participan representantes de las comunidades autónomas litorales, representantes de ministerios y expertos de universidades y otras organizaciones. Las banderas azules se ratifican por un jurado internacional.  

Antecedentes de vertidos

En septiembre de 2018 el Consistorio tuvo que abonar 1.800 euros de multa a la Agencia Canaria de Protección del Medio Urbano y Natural (APMUN) por unos vertidos no autorizados en la costa de Santiago del Teide. La oposición le reprochó entonces al alcalde falta de transparencia en la gestión del pago de esa multa. “En lugar de anunciar al pleno la multa o explicar a la oposición o a los medios la situación que se había creado, Navarro prefirió esconderlo en una montaña de decretos”, aseguró Pedro García Martín, portavoz socialista antes y ahora.

Ese vertido en cuestión se produjo en la playa de la Arena, muy cerca de la zona de baño con bandera azul. La Agencia Canaria de Protección del Medio Urbano y Natural impuso la sanción al tratarse de un aliviadero no autorizado.

Con posterioridad, en marzo de 2019,  el Ayuntamiento tuvo que proceder al cierre de manera provisional de la Playa Chica de Puerto de Santiago y la Playa de Neptuno -ubicada en Playa de la Arena- debido a un problema técnico surgido durante la ejecución de las obras de reparación del emisario submarino.