Para una vez que Paco Valido toma una decisión, va y se le descoyunta el grupo de gobierno. Hay quienes aseguran que le salió una jugada maestra sin querer, porque en el pacto de Gobierno PP-Ciuca estaban hasta la gorra de las andanzas de la concejala Guadalupe López y su señor esposo, Salvador Santana, empresario convertido en mandamás de la concejalía de su cónyuge, la muy influyente -debe ser- de Festejos, Ferias y Mercados. El caso es que Valido, desde Moguer, se lanzó a la conquista de ese excitante mundo de las decisiones políticas y anunció al mundo entero que acababa de fichar a Luis León Barreto como pregonero de San Juan. Guadalupe y su esposo montaron en cólera y emitieron un duro comunicado recordándole al alcalde que está para todo, menos para mandar. Con el comunicado firmaron ambos su propia destitución.