La oposición se preguntaba este viernes cómo es posible que, habiéndose decidido en 2005 otorgar la Medalla de Oro de la ciudad a todos los ex alcaldes, Pepa reservara la de Soria para el año preelectoral. Misterios que tiene la política. Del mismo modo, constituyó motivo de misterio la afirmación-amenaza de la alcaldesa en el momento de acordarse votación secreta y con urna para los honores y distinciones de este año: “A lo mejor se llevan alguna sorpresa”. Pues sí: los concejales del PP se divirtieron de lo lindo ejerciendo por primera vez de atolondradas avecillas del campo que ora metían voto abstencionista en la urna, ora metían voto negativo. Lo malo de tantas gracias fue que hasta el ex dirigente del PP Juan Andrés Melián se llevó una abstención de alguno de sus propios compañeros, porque la oposición enseñaba las papeletas para que no hubiera sospechas. Hasta vengándose se nos equivocan estos muchachos.