Illa carga contra Aragonès por su proyecto independentista pero promete una oposición constructiva

Si el nuevo Govern quiere la independencia de Catalunya se encontrará con la oposición rotunda del PSC. Así se lo ha advertido al presidenciable de ERC, Pere Aragonès, el jefe del PSC en el Parlament, Salvador Illa, que no obstante ha avanzado la disposición socialista a apoyar al nuevo Ejecutivo en la gestión del virus y de los fondos europeos. Illa ha combinado la dureza frente a los planes secesionistas con la mano tendida en las políticas de recuperación económica. Y ha apremiado al Govern a ponerse a trabajar. “No le daremos 100 días”, ha resumido Illa, que ha avanzado que la oposición del PSC será “contundente y constructiva”.

El exministro de Sanidad, que se convertirá en jefe de la oposición una vez Aragonès sea investido el viernes, ha cargado contra los “engaños” que, a su juicio, ha pronunciado el presidenciable republicano en su intervención en relación al procés, así como de su intención de “culminar” la independencia. “Esto no pasará, y usted lo sabe”, ha lanzado Illa, que ha pedido a Aragonès “matizar” sus palabras “porque sabe que no pasará”.

La mayor crítica de Illa ha sido para los planes soberanistas esbozados por Aragonès, en especial los dos años de margen que el acuerdo de ERC y la CUP da a la mesa de diálogo con el Gobierno central. “Diálogo no es decir 'si no sale lo que yo quiero me voy, esto es más un chantaje”, ha afeado el socialista al republicano. Illa ha contrastado las palabras de Aragonès prometiendo la independencia con el talante “correcto y educado” del futuro president, al que ha pedido “aclarar si quiere diálogo o confrontación”.

Aragonès ha replicado a Illa reclamándole que acepte un referéndum sobre la independencia. “Hablemos de todo sin vetos, atrévase a defender su propuesta en un referéndum, que sea la propuesta que los catalanes eligen y no la que se les impone”, le ha pedido. “Lo que ha fracasado en los últimos 10 años es el Estado español”, ha asegurado Aragonès, que ha calificado de “fracaso” la sentencia del Constitucional sobre el Estatut o la respuesta al 1-O. “Y también es un fracaso que los partidos que defienden su proyecto político no lleguen al 50% de los votos en las elecciones”, le ha dicho.

El futuro president ha desoído la queja de Illa por el veto de los grupos independentistas al PSC suscrito durante la campaña y lo ha vinculado con la incapacidad de los socialistas para alcanzar una mayoría para la investidura. “Que usted no haya obtenido la confianza para ser president no es un veto, es que no ha obtenido la confianza porque había un proyecto que sí podía obtenerlo”, ha dicho Aragonès, que ha emplazado al socialista a “levantar los vetos” relacionados con los debates sobre la monarquía o la autodeterminación anulados por el Tribunal Constitucional.

También ha lamentado Illa el nuevo “embate democrático” planteado por los independentistas. “¿De verdad un embate democrático es lo que percibe que quiere la sociedad catalana?”, se ha preguntado. “Con embates no se vence al virus ni se aprovechan los fondos europeos”, ha apostillado Illa. En contraste, Illa ha reclamado a Aragonès que el diálogo no sea solo con el Gobierno central, sino también entre catalanes, si quiere superar el conflicto soberanista. “Admiro los planteamientos ambiciosos, pero más si son realistas”, ha zanjado.

Si bien Illa ha considerado que el nuevo Govern de ERC y Junts “no es el que Catalunya necesita”, ha deseado suerte al nuevo Ejecutivo y ha confiado en que dure cuatro años, a la vez que le ha puesto los primeros deberes. “Empecemos por lo básico, un presupuesto en tiempo y forma que pueda entrar en vigor el próximo 1 de enero”, ha reclamado el nuevo líder de la oposición.

Ha hecho hincapié Illa en los tres meses que ha costado alcanzar un acuerdo entre independentistas, lo que a su juicio resta solidez al nuevo Govern y autoridad a Aragonès como president. “No empieza usted con buen pie, pero juzgaremos por lo que haga en un futuro”, ha aseverado Illa, que ha lamentado las “desconfianzas” entre ERC y Junts, cuyo acuerdo para formar Govern de coalición ha tildado de “pacto de conveniencia”. “Tendrá toda la lealtad del grupo socialista y toda la exigencia, cuidado que no le fallen antes los apoyos más cercanos”, ha pronosticado Illa.