La agenda 'verde' de Podem en el Parlamento valenciano: limitar centros comerciales, ley de Prevención de Residuos y protección de zonas rurales

Podem insiste en la necesidad de impulsar una Ley de Prevención de Residuos y Economía Circular en su estrategia ambiental para luchar contra el cambio climático. La formación morada ha presentado este lunes sus prioridades legislativas, una batería de medidas divididas en 15 bloques para ámbitos como agricultura, gestión del agua, comercio, ganadería, energía o urbanismo, entre otras áreas.

La responsable de la Secretaría de Mundo Rural, Sostenibilidad y Soberanía alimentaria de Podem, Beatriu Gascó, ha presentado el documento marco de actuaciones que indica las pautas políticas para los representantes de los diferentes niveles institucionales del partido en la Comunitat Valenciana.

Una de ellas es esa Ley de Prevención de Residuos que precisamente Podem impulsó la pasada legislatura en el parlamento valenciano, que fue debatida y aprobada en comisión, con la incorporación de las enmiendas correspondientes, pero que no pudo ser finalmente llevada a pleno para recibir luz verde ante el adelanto de las elecciones autonómicas.

La estrategia, según ha destacado, se centra en torno al trabajo que deben llevar a cabo “para luchar contra el cambio climático de manera eficiente y para siempre” en colaboración y consenso con los niveles autonómico, municipal, estatal y europeo.

El documento incluye 15 bloques, entre los que la dirigente de Podem y portavoz adjunta en Les Corts ha destacado el de la fiscalidad verde, “ya que tanto desde Europa como desde el ministerio nos exigen encontrar fórmulas para financiar la política ambiental basada en la premisa de quien contamina paga”.

También ha incidido en que seguirán trabajando en la lucha contra la situación en la que se encuentra la gestión de residuos en general, “no solo desde unos vertederos muy atrasados en sus infraestructuras, sino sobre todo en la capacidad de llevar a cabo una recogida selectiva de la materia orgánica y de cada uno de los tipos de residuos que se generan”.

El primer bloque se centra en la agricultura y señala como medidas a tomar, entre otras, el desarrollo de las leyes de Estructuras Agrarias y de l'Horta, la reforma del IVIA, la promoción de productos agroalimentarios valencianos o medidas de apoyo a los mercados de proximidad; el segundo sobre Ciclo Integral del Agua propone un plan de recuperación y reutilización del agua depurada, un plan de separación de aguas pluviales de las de saneamiento, refuerzo de inspecciones en calidad del agua y vertidos o iniciativas municipales de recuperación de la gestión pública del agua.

El bloque sobre tratados de libre comercio reclama la puesta en marcha del Patsecova y explicita la “oposición a macroprotectos comerciales que van en contra de la actual tendencia mundial de abandono de centros comerciales” o el control de tratados de libre comercio que se demuestren “perjudiciales” para la producción autóctona.

El cuarto bloque, sobre contaminación atmosférica, plantea incrementar las medidas de control, realizando estudios de incidencia sanitaria, mientras el quinto aborda la educación ambiental y propone una Ley de Educación Ambiental o la reforma de la ley educativa para introducir este aspecto de manera transversal.

El bloque seis, sobre energía y emisiones CO2, defiende iniciativas en apoyo y fomento de las renovables, así como de fomento de la biomasa, mientras el siete versa sobre la ganadería y propone modificar la ley que la regula en la Comunitat, que data de 2003, así como medidas de protección de la ganadería extensiva o el control de macrogranjas.

La gestión forestal sostenible y medio natural es el título del octavo bloque, que plantea modificar la Ley Forestal Valenciana, además de la Ley de Vías Pecuarias, así como actualizar todos los planes de ordenación y prevención de incendios, también en los parques naturales. El noveno bloque aborda la minería y plantea el cierre de aquellas ilegales, aumentar las inspecciones y estudiar el impacto social y de salud pública de estas explotaciones.

El décimo bloque se centra en la pesca y plantea un plan de lucha contra la contaminación en la costa, el apoyo a la pesca artesanal de bajo impacto y el aumento de inspecciones y control de la trazabilidad del pescado de restaurantes y comercios. Los residuos son el tema central del undécimo bloque, en el que además de la citada ley se plantean medidas complementarias para proteger el medio ambiente “frente al abandono y contaminación de envases y residuos”, al tiempo que plantea una ley para gestionar los residuos en vertederos y proceder a su valorización, incineración y coincineración.

Urbanismo y territorio es el título del bloque número 12, en el que se defiende a los pequeños productores frente a macroproyectos y grandes infraestructuras, se pide una revisión de todas las leyes y normativas con nuevos criterios de usos de agua, medidas de eficiencia energética para los edificios de todo tipo o la aplicación efectiva del Patricova.

En el decimotercer bloque, sobre vertebración del territorio, despoblación y desarrollo rural, se plantean presupuestos que contemplen la salvaguarda de las zonas rurales, la defensa del transporte de cercanías y la financiación efectiva de municipios en riesgo de despoblación, entre otras medidas. El bloque 14 aborda la fiscalidad verde y plantea dos medidas a nivel autonómico: una ley complementaria de mantenimiento, delimitación y puesta en valor social de las vías pecuarias, y una ley para la conservación de la biodiversidad, la gestión del suelo forestal y su mantenimiento.

El último bloque aborda medidas transversales y destaca la necesidad de cooperación entre administraciones, así como con colectivos y asociaciones que necesiten ayuda en el territorio para llevar sus propuestas a Corts.