Barcelona da un paso más para ubicar en el puerto el futuro Museo Hermitage

Barcelona ha dado un paso más para la ubicación del futuro Museo Hermitage en la ciudad, después de que el puerto haya admitido a trámite la solicitud para construir este equipamiento en el ámbito de la Nova Bocana, en el Port Vell, lo que supondría una inversión privada superior a los 50 millones de euros.

Según la resolución que publica este miércoles el Boletín Oficial del Estado (BOE), las sociedades Varia Hermitage Barcelona y Cultural Developement Barcelona han solicitado conjuntamente el otorgamiento de una concesión destinada al establecimiento del museo en la Nova Bocana.

Concretamente, la petición de concesión se ha realizado sobre la parcela 1a/31.3.b, que corresponde al Edificio Central del Plan Especial de la Nova Bocana.

Esta concesión ha sido solicitada en favor de la sociedad Museo Hermitage Barcelona, que sería la beneficiaria de la concesión y la que desarrollaría su proyecto museístico.

El procedimiento administrativo se inicia oficialmente este miércoles con la publicación de la solicitud en el BOE, y continuará con la exposición pública del proyecto durante un período de 20 días, según ha concretado el Puerto de Barcelona.

Aunque el proyecto del Museo Hermitage de Barcelona es privado, necesita para tirar adelante la aprobación de la Autoridad Portuaria de Barcelona, en cuyos terrenos se quiere construir, y el visto bueno del Ayuntamiento de Barcelona.

El Gobierno municipal reclamó el pasado mes de noviembre a los promotores del Museo Hermitage en la capital catalana conocer el nuevo proyecto, para el que los inversores encargaron un nuevo edificio al prestigioso arquitecto japonés Toyo Ito, ganador del premio Pritzker 2013, en el Puerto de Barcelona.

El propio comisionado de Cultura, Joan Subirats, alabó entonces el Museo Hermitage de Ámsterdam porque está instalado en la lógica museística de la ciudad holandesa y cuenta con la implicación del ayuntamiento, mientras que recordó que los de Dallas y Londres cerraron por no tener garantías financieras ni calidad.

La Asociación de Vecinos de la Barceloneta expresó en diciembre pasado su apoyo a la construcción en el recinto portuario del museo, un proyecto que calificó de “integrador” y que cree que generará empleo y atraerá al barrio un turismo cultural de calidad, “respetuoso con la ciudad”, muy diferente del que ahora tiene.

El Museo Hermitage de Barcelona sería una especie de subsede del famoso museo de San Petersburgo (Rusia) y supondría una inversión privada de unos 50 millones de euros.

Sus responsables han advertido, no obstante, de que el proyecto solo será una realidad si cuenta con la “complicidad” del Ayuntamiento de Barcelona y la “simpatía” de las entidades del barrio de la Barceloneta.