'Pulp Fiction': noche de experimentos con Vermut

Ya nos lo sabemos todos: hamburguesas y pasajes de la Biblia, chistes racistas y batidos de cinco dólares, humor y violencia. Esto y más invocó Carlos Vermut en su lectura dramatizada de Pulp Fiction, su película favorita, en el Cine Capitol. No estaba solo. José Coronado como Jules Winnfield, Jorge Sanz como 'alter ego' de John Travolta (Vincent Vega); Elena Anaya, que pasó de Mia Wallace al Señor Lobo y José Sacristán como el temible Marcus Wallace, el gran jefe. El malo.

La idea era festejar los 20 años de la película con la que Tarantino ganó la Palma de Oro en Cannes. Y hacerlo con un formato nuevo y difícil, declarado “One night only” por su carácter único e irrepetible, en que los actores ocuparon el escenario sentados en fila frente a sus atriles sosteniendo el guión, vestidos de negro, sin más escenografía que una pantalla que proyectaba fotogramas del filme de Tarantino. La idea del espectáculo, producido por La Tropa, es jugar con la imaginación de los fans del filme original, recreando en su memoria sus mejores momentos.

Durante las casi dos horas que duró la lectura dramatizada, los actores permanecieron sentados, salvo en momentos puntuales, como cuando Anaya y Sanz ocuparon el centro con su peculiar versión del mítico baile de Vincent y Mia en el Jack Rabbit Slims. Vermut, que ejerció de narrador y maestro de ceremonias a un lado del escenario, hizo honor al estilo del propio Tarantino infiltrándose en la escena y bailando con ellos.

No todo fueron bailes. Humo problemas de audio -al parecer debidos a interferencias causadas por barridos de la Policía, según comentó el propio director de Magical Girl- causaron a todo el equipo y al público momentos de tensión no deseada, que no obstante se resolvieron con frescura en el escenario. Lejos de ignorar las interrupciones, el director las contrarrestó con humor y espontaneidad interrumpiendo la lectura para resolver la situación, que en algún caso dificultaron la escucha de los mejores dialogos de Tarantino.

Los mejores diálogos

Estos son: los de Jules y Vincent sobre milagros, hamburguesas y masajes en los pies, los de Vincent y Mia sobre silencios incómodos y maridos asesinos, y los azucarados momentos entre el boxeador Butch (Sergio Peris Mencheta) y su novia Fabienne (Bárbara Santa Cruz). Entre los momentos álgidos estuvo el de Jorge Sanz con la sobredosis de Mia, que fue recibido con carcajadas del público que prácticamente llenó la sala principal del Capitol.

Pulp Fiction renovó el género de gángsters con innovaciones como la mezcla de lo culto y lo popular, la violencia banal y humorística, el montaje fragmentado o, como comentó hoy Vermut, la ausencia de una gran trama en beneficio de los personajes “y sus minucias”. La película además marcó el inicio del auge del cine independiente en Estados Unidos y el cambio de las reglas del juego, al lograr que una producción de apenas 8 millones de dólares amasara más de 212 millones de recaudación en todo el mundo.

Además de resucitar a Bruce Willis, y sobre todo a John Travolta, que había arruinado su carrera haciendo comedias de bebés. Quizá ahora sea el turno de Jorge Sanz.