CE discute miércoles plan para incentivar cultura empresarial en Europa en primera reunión tras Navidades

La Comisión Europea discutirá el próximo miércoles 9 de enero el plan de acción que presentará el comisario de Industria, Antonio Tajani, para promover una nueva cultura empresarial en Europa en la que será la primera reunión del Colegio de Comisarios que preside el jefe del Ejecutivo comunitario, José Manuel Durao Barroso, tras las vacaciones de Navidad.

El plan de acción, bautizado 'Acta Empresarial 2020', incluirá “medidas específicas” para aprovechar el potencial de las miles de personas que quieren abrir su propio negocio en el actual contexto de crisis y elevado desempleo en Europa, especialmente en el caso de mujeres, jóvenes, senior, desempleados e inmigrantes, según ha explicado en rueda de prensa el portavoz del Ejecutivo comunitario, Frédéric Vincent.

La propuesta pondrá de relieve la necesidad de promover un cambio cultural “profundo” en Europa a través de “la educación empresarial eficaz” y también abordará los obstáculos para promover el empresariado como la falta de financiación, la carga burocrática y cómo garantizar una segunda oportunidad para los empresarios honestos cuyo primer negocio haya quebrado no obstante, según ha avanzado el Ejecutivo comunitario.

En su primera reunión del año, los comisarios también mantendrán sendos debates de orientación sobre la necesidad de promover las energías limpias en el sector de transportes para reducir la elevada dependencia del petróleo de Europa y sobre las propuestas que contempla el comisario de Transporte Sim Kallas para crear un verdadero sector ferroviario europeo, ha precisado el portavoz.

Kallas ya avanzó el año pasado que “cualquier cambio tendrá por objetivo aumentar la eficacia, puntualidad y predictibilidad” del servicio ferroviario en beneficio de los ciudadanos y criticó que “todavía hoy algunas barreras técnicas dificultan producir y certificar trenes para su circulación en las fronteras internas de la UE”.

También lamentó que “sólo unos pocos países de la UE han abierto hasta la fecha” el sector a la competencia y que las condiciones de acceso al mercado favorezcan a los operadores históricos nacionales, algo “particularmente cierto donde los operadores ferroviarios históricos también controlan la infraestructura”.

“Desde el punto de vista de la competencia, todavía hoy hay dificultades en la relación entre los gestores de las infraestructuras que operan la red y los operadores de servicios ferroviarios que la utilizan para transportar pasajeros o bienes. Estamos analizando si se necesita un mayor grado de separación estructural para crear condiciones más equitativas para la competencia”, explicó el comisario el pasado febrero, cuando también apostó por analizar la contratación pública de estos servicios.

PRIORIDADES PRESIDENCIA IRLANDESA

Al día siguiente, jueves 10 de enero, Barroso se desplazará a Dublín con el conjunto de comisarios para analizar con el Gobierno irlandés que preside Enda Kenny sus prioridades en el marco de la Presidencia semestral de la UE que ejerce Irlanda desde el pasado 1 de enero bajo el lema 'estabilidad, empleo y crecimiento'.

Entre las prioridades de Irlanda para los próximos seis meses figuran avanzar en la gobernanza económica europea y en la puesta en marcha de la unión bancaria, centrarse en atajar el problema del elevado paro juvenil por la crisis, promover la economía digital y medidas para apoyar a las pequeñas y medianas empresas y el potencial de los recursos naturales, así como la promoción de acuerdos de libre comercio entre la UE y terceros países estratégicos como Estados Unidos.

Al igual que España, Irlanda tiene un especial interés en avanzar en la creación de la unión bancaria, incluido el mecanismo único de supervisión bancario único pactado por los líderes europeos en la cumbre de junio, condición necesaria para que el fondo de rescate permanente europeo pueda utilizarse para recapitalizar directamente a los bancos, evitando que compute como deuda para los Estados. El mecanismo no estará operativo hasta marzo de 2014.

El Gobierno irlandés, cuyo país se vio obligado a solicitar un rescate hace dos años tras destinar 64.000 millones de euros del contribuyente para salvar de la quiebra a su sistema financiero, espera todavía que su país se pueda beneficiar de esta recapitalización directa en el futuro, incluso de forma retroactiva.

El viceprimer ministro irlandés y titular de Exteriores y Comercio, Eamon Gilmore, ha defendido este viernes en una tribuna publicada en el diario galo 'Le Figaro' que “Europa no puede ser rehén de la banca más débil de uno de sus Estados miembro”.

“Los contribuyentes de cada Estado miembro no pueden cargar solos con el peso del sistema financiero europeo. Cuando una institución financiera presenta un riesgo para Europa en su conjunto, toda Europa debe contribuir a atajar las recaídas que amenazan a todo el mundo”, ha defendido.

Irlanda también tendrá que encarar otros importantes desafíos en los próximos meses como las negociaciones para sacar adelante un acuerdo sobre el próximo presupuesto europeo multianual para el periodo 2014-2020 y el desafío que representa la repatriación de competencias desde Bruselas a Londres que defiende el primer ministro británico, David Cameron, cada vez más presionado en casa para convocar un referéndum sobre la permanencia o no de Reino Unido en la UE.