La Xunta gasta 600.000 euros en una nueva campaña publicitaria para animar a tener hijos
Hace tres décadas que en Galicia mueren más personas de las que nacen. La población gallega sufre lo que se conoce como “invierno demográfico” y, ante este evidente problema, el Gobierno gallego puso en marcha su Plan de Dinamización Demográfica, un documento despachado en un trámite parlamentario de menos de cuatro horas que incluye ciertas medidas de apoyo a las familias, como deducciones fiscales, con otras de marcado carácter publicitario o propagandístico, tales como a considerar ciudadanos de pleno derecho a los “concebidos y no nacidos” o la puesta en marcha de diversas campañas de publicidad. La Consellería de Traballo e Benestar se dispone a ahondar en esa línea publicitaria con la puesta en marcha de su tercera campaña de anuncios sobre el tema, poniendo sobre la mesa en esta ocasión hasta 600.000 euros.
Entre medidas y circunstancias que, a priori, desincentivan la decisión de tener hijas y hijos, como las subidas de precios en las escuelas infantiles, los recortes en educación, las bajadas de salarios o el desempleo, Benestar se dispone a apelar nuevamente a la “responsabilidad compartida por toda la sociedad” para invertir la tendencia demográfica. En un contexto en el que la propia Xunta mantiene que la falta de dinero o el paro no influyen a la hora de decidir tener descendencia, la Consellería pone sobre la mesa 600.000 euros que se suman a los 614.840 que gastó en la primera edición de la campaña y a los 318.900 que costó la segunda. En total, más de millón y medio.
La empresa que se haga con el contrato tendrá que desarrollar una campaña destinada a la población de entre 18 y 45 años con un “discurso vital, amable, positivo y evitando un tono moralizante”, encarga la Xunta, que señala además la “necesidad” de poner el acento en las “consecuencias negativas de unos índices continuados de baja natalidad”. “Niñas y niños deben ser los protagonistas de la campaña” y, “junto a esta visibilización”, deben “verse los recursos públicos, familiares e individuales” que “favorezcan esa idea en el entorno social” y que “hagan de Galicia una comunidad moderna, amable no solo para nuestros mayores”.
Además, en esa publicidad la “conciliación ha de jugar un papel importante”, mostrando “qué recursos existen y por cuáles debemos apostar” y explican que “la solución ha de venir de la mano de todos los gallegos y gallegas”. Tiene que ser, dice la Xunta, un mensaje “realista, sin negar la problemática” pero “positivo, sin caer en mensajes manidos”. Todo, especifica, debe servir para presentar una “imagen moderna y actual de Galicia”, con “música que llame a escuchar el anuncio” y “palabras no esperadas, que generen sorpresa/perplejidad” e “insistan en una nueva óptica de la natalidad”. Se trata, además, de “ampliar la imagen actual de la campaña y llegar a todos los tipos de familia”, también a las que incluyen hijos o hijas adoptadas.
Críticas de la oposición
Esta nueva contratación llega después de que las dos anteriores ediciones de la campaña ya hayan sido objeto de críticas por parte de toda la oposición parlamentaria, que considera incongruente que se produzca este gasto en anuncios en un contexto de recortes sociales. Así, por ejemplo, desde el PSdeG su diputada Carmen Gallego consideró que los tijeretazos “casan mal con la petición para que las mujeres nos pongamos todas a tener hijos por la caída demográfica brutal de Galicia”. A su juicio resulta “cínico” que el Gobierno destine fondos del erario a estas campañas mientras retira servicios públicos.
En la misma línea el parlamentario de AGE Juan Fajardo ha calificado de “hipócrita” que “por una parte, se anime a la ciudadanía a tener hijas e hijos” para “después, dejarlos abandonados a su suerte por parte de la Xunta” aunque “una vez nacidos no tengan ni siquiera para comer”. En la misma línea, la diputada del BNG Carme Adán, recuerda que “el problema no es tener hijos e hijas”, sino “alimentarlos, comprar los libros de texto y todo lo que necesitan”. Para la nacionalista resulta “indecente” desarrollar campañas como esta mientras, por ejemplo, en el mercado laboral la maternidad supone un perjuicio para las mujeres o mientras “suben el precio de las escuelas infantiles y de la atención a la dependencia”.
