Diez restaurantes donde comer el mejor cocido de Madrid: castizos, con vuelcos ilimitados y un vegano

El año en Madrid ha empezado bajo cero. Enero suele ser el mes más frío y durante las últimas semanas el descenso de los termómetros en la capital ha sido notable. Estas temperaturas invernales piden platos calientes con los que atemperar tanto el cuerpo como el estómago y el cocido es el favorito de los madrileños.

En cuanto el frío empieza a apretar, la mayoría de los restaurantes de la ciudad suelen incluirlo en su carta. En invierno se puede tomar cualquier día de la semana, aunque es típico comerlo los domingos. La forma de servirlo causa cierta controversia, aunque una mayoría coincide en que debe comerse en tres vuelcos a los que se solía llamar “sota, caballo y rey”. Primero la sopa, después los garbanzos con las verduras y para terminar, la carne.

El cocido es un plato denso y de degustación prolongada que se ha reinterpretado de múltiples formas a lo largo de la historia: en croqueta, en forma de donut y hasta en una versión vegana con chorizo vegetal. Aunque ahora se ha convertido en todo un privilegio comer un buen plato de esta receta, sus orígenes son muy humildes. Las clases más bajas tomaban este plato porque les aportaba una gran carga energética para trabajar. Además, un solo cocido daba para varias comidas: sopa, carne, verdura y ropa vieja con las sobras. Comenzó sirviéndose en las tabernas de la capital y terminó convirtiéndose en un plato más del menú diario que tomaban nobles y burgueses de aquella época.

Se desconoce cómo surgió esta receta, aunque todo apunta a que se trata de una evolución de la olla podrida manchega, uno de los platos más famosos del Siglo de Oro. Sus ingredientes principales son los garbanzos, la carne, el tocino y la patata, aunque se pueden añadir verduras como la zanahoria o el repollo y distintos tipos de huesos para dar más sabor al caldo.

Existen muchas formas de hacerlo, servirlo y comerlo, aunque la receta tradicional es la que sigue triunfando en la mayoría de restaurantes que recogemos en este listado. En Hoy Se Sale hemos seleccionado los favoritos de los madrileños, con opción vegana incluida y con precios para todos los bolsillos. Estos son los diez mejores restaurantes para comer cocido en Madrid:

Entre la tradición y la leyenda: Malacatín

Los amantes del cocido madrileño aseguran que este restaurante es uno de los imprescindibles en Madrid para degustar este plato. Llevan preparando la misma receta desde 1895 en la que confluyen la rabia de la piparra al vinagre, la contundencia de la sopa, la gracia de los garbanzos castellanos, la suavidad del tomate tamizado y la pringada del tocino de veta. Una mezcla explosiva que se hizo famosa a raíz de un reto: el que se lo acababa, no pagaba. Era tal el despliegue de platos sobre la mesa que la mayoría no podían terminárselo, muy pocos valientes lo consiguieron. Actualmente los platos siguen siendo igual de grandes, pero el reto ha quedado en una leyenda que siempre formará parte de la historia del restaurante.

El cocido del Malacatín se sirve en tres vuelcos, como manda la tradición, aunque si eres de los que prefiere saborear todo junto puedes pedirlo como plato único. Además, ahora se puede probar sin necesidad de ir hasta el restaurante gracias al servicio de delivery que han puesto en marcha. Para los que no se atreven con los tres vuelcos existe otra opción, una versión “mini” por ocho euros que se puede degustar en barra.

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Bueno, bonito y muy barato: Casa Álvarez

Es actualmente el menú de cocido más barato de Madrid, por tan solo 15 euros se puede degustar este delicioso plato en Casa Álvarez. Llevan desde 1920 abiertos y su bajo precio no denota menor calidad en lo que ofrecen. El cocido de esta casa de comidas es tan completo como el de cualquier restaurante de la capital, lleva morcilla, pollo, chorizo, tocino, morcillo, zanahoria, patata, repollo y garbanzos. Todo acompañado de una sopa con sus respectivos fideos. La salsa de tomate picante no puede faltar y para maridar la mejor opción es un buen vino. Los clientes destacan la amabilidad del personal como lo mejor de Casa Álvarez, además de su delicioso cocido.

Moderno y castizo: Verbena Bar

Mezclar lo moderno con lo castizo es una moda cada vez más extendida en la capital. Muchas personas se oponen a este concepto que ya ha llegado a las cocinas madrileñas. En Verbena Bar combinan a la perfección la tradición con las tendencias más actuales y el resultado de esta mezcla es un cocido para chuparse los dedos. Mantienen la receta original y lo cocinan durante más de cuatro horas a fuego lento. Se sirve al gusto del comensal, por vuelcos o todo junto. Además, cuentan con una opción vegetariana.

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El centenario: Lhardy

El de Casa Álvarez es el más barato de Madrid y el de Lhardy el más caro. No es un cocido asequible para todos los bolsillos, aunque si buscas darte un buen capricho gastronómico merece la pena probarlo. En su receta no hay nada diferente a la del resto, pero la forma en la que se sirve es muy especial. Se toma en dos vuelcos, primero la sopa con el pollo y después los garbanzos, las verduras y el resto de carne. El plato lo acompañan con un tomate de pata negra aliñado y servido con un buen aceite de oliva.

Además, Lhardy no es un restaurante cualquiera. Pertenece a la lista de los escasos restaurantes centenarios que alberga Madrid. Lleva sirviendo comidas desde 1839, casi dos siglos, y ha aparecido en las obras literarias de los escritores Benito Pérez Galdós y Azorín. Aunque hace un par de años cambió de dueños, mantiene su decoración original intacta.

Con más ingredientes que ninguno: La Gran Tasca

En La Gran Tasca siguen al milímetros eso de “más vale que sobre que no falte”. Es considerado el cocido madrileño con más ingredientes de la capital. Utilizan 15 para ser exactos: garbanzos, patata, repollo, pimiento rojo, zanahoria, morcilla, chorizo, tocino, panceta, costillas de cerdo, codillo, morcillo, gallina, huesos y pelota madrileña. Todos se sirven en el segundo vuelco, justo después de la sopa. Se puede repetir cualquiera de los ingredientes, aunque muy pocos llegan a hacerlo.

El cocido se acompaña con guindillas, cebolleta y salsa de tomate natural con cominos para los garbanzos. El buen pan y el buen vino tampoco faltan sobre la mesa. Si todavía te queda algo de hambre después de este festín, sus postres caseros son deliciosos. El flan de huevo o la leche frita son el broche final perfecto para una comida tan contundente.

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Un local pequeño con raciones gigantes: Nuevo Horno de Santa Teresa

El tamaño del restaurante Nuevo Horno de Santa Teresa puede engañar. El local es pequeño pero su cocido es de los mejores de Madrid. De hecho, en 2022 ganó el premio al Mejor Cocido Madrileño de la 12ª Ruta de del Cocido Madrileño. Lo sirven en tres vuelcos. Por un lado la sopa, por otro los garbanzos con las verduras y para terminar la carne. Además, el caldo se sirve en una inmensa sopera que se deja en el centro de la mesa para que los comensales puedan repetir las veces que quieran. Sobre la mesa tampoco faltan las piparras, la cebolleta y la salsa de tomate picante para los garbanzos.

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El más famoso de Vallecas: Cruz Blanca

Los vallecanos tienen la suerte de contar en su distrito con uno de los mejores restaurantes de la capital para comer cocido. La Cruz Blanca de Vallecas es todo un emblema de la ciudad, hasta el rey emérito se ha puesto las botas con su delicioso cocido madrileño. El secreto de su receta es una cocción lenta y un producto de buena calidad. Se sirve en dos vuelcos y añaden un elemento antes de la sopa que siempre triunfa: una croqueta de carne de cocido. Cada semana decenas de personas se desplazan hasta Vallecas para comer este cocido madrileño que levanta pasiones.

En puchero de barro: La Bola

Junto al del Malacatín, el cocido de La Bola es uno de los más conocidos de Madrid. Se prepara sobre carbón de encina y en puchero de barro, uno de los elementos que distingue a este cocido del resto que se pueden tomar en la capital. Va directo del fuego a la mesa en el mismo recipiente de barro para que el sabor y el calor se mantengan. En cuanto a la receta, respetan la tradicional sin añadidos: tocino, patata, chorizo y garbanzos. No necesita mucho más para triunfar. Te recomendamos reservar con tiempo, suele haber lista de espera.

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De raciones ilimitadas: Casa Carola

En Casa Carola también les gusta hacer todo a lo grande y que todo el mundo salga lleno de su restaurante, por eso su menú de 32,90 euros incluye todas las repeticiones que los comensales deseen. Su cocido se sirve en tres vuelcos, precedido de una croqueta y con postre para terminar. Aunque los ingredientes están separados en bandejas, se sirven todos a la vez sobre la mesa. De esta manera, los comensales pueden servirse a su gusto y las cantidades que deseen. Barra libre de cocido.

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El animal free: Distrito Vegano

Terminamos este listado con la versión más innovadora del cocido madrileño. En Distrito Vegano cuentan con versiones vegetales de la gran mayoría de platos que forman parte de la gastronomía española más tradicional y uno de los más solicitados es el cocido. También lleva chorizo, aunque en este caso su procedencia no es de origen animal.

La receta se compone de garbanzos ecológicos, lacón a base de proteína de guisante, falso chorizo gallego, calabaza, patata y col asada. Es una mezcla entre el cocido gallego y el madrileño. Se sirve en dos vuelcos, por un lado el caldo y por otro el resto de componentes. Es una opción transgresora y que se sale de lo tradicional, aunque los que lo han probado aseguran que no tiene nada que envidiar al de toda la vida.