China niega el genocidio

Los duros enfrentamientos que están teniendo lugar en la región de Xinjiang, en los que por el momento han fallecido 184 personas, no son considerados por el gobierno chino como un genocidio. “¿En qué país puede llamarse a esto genocidio?”, se preguntó Qin Gang, portavos del Ministerio de Exteriores de China. “Esperamos que nuestros hermanos musulmanes se puedan dar cuenta de la verdad del incidente del 5 de julio en Urumqi. Una vez sepan la verdad, apoyarán nuestras políticas étnicas y religiosas y las medidas que el gobierno chino ha adoptado para abordar el incidente”, agregó.

De esta manera responde el gobierno chino a las acusaciones que le han llegado desde Turquía, donde el enfrentamiento entre chinos de la etnia han y uigures es considerado como un genocidio. La semana pasada, Recep Tayyip Erdogan, primer ministro turco, solicitó la intervención de las autoridades chinas en el conflicto de Xinjiang, al considerar que en esta región se estaba cometiendo un genocidio.

Por su parte, el ministro de Exteriores chino, Yang Jiechi, indicó a su homólogo turco en conversación telefónica el domingo que los disturbios de Urumqi fueron un grave delito orquestado por las “tres fuerzas malignas”, según informó la agencia oficial Xinhua, en referencia al extremismo, el separatismo y el terrorismo.

En un editorial titulado 'No mezcléis los hechos', el diario en lengua inglesa 'China Daily' afirma que el hecho de que 137 de las 184 víctimas fueran han “habla claramente de la naturaleza de lo ocurrido”. El balance de víctimas incluye a 46 uigures. El diario instó al primer ministro turco a “retractarse de sus palabras [...] que constituyen una interferencia en los asuntos internos de China”.