El 21% de los riojanos espera más de una hora a su médico de cabecera
El 20,9 por ciento de los riojanos estuvieron en 2014 más de una hora en la sala de espera para entrar en la consulta del médico de Atención Primaria, un procentaje que aumentó hasta el 35 por ciento en el caso del especialista, según se desprende del 'Barómetro Sanitario 2014', realizado por el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) a petición del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.
A nivel nacional, el 21,9 por ciento esperaron en Atención Primaria y un 31,6 por ciento en el especialista. Si se analizan los datos relativos al tiempo de espera para entrar a las consultas del médico de cabecera en las comunidades autónomas, el informe muestra que los canarios fueron los que más esperaron (27,9 por ciento), seguidos de los ceutíes (27,7 por ciento), melillenses (26,9 por ciento), murcianos (25,9 por ciento), gallegos (25,9 por ciento), valencianos (25,6 por ciento), castellano-manchegos (24 por ciento), catalanes (23,4 por ciento), madrileños (22,6 por ciento) y extremeños (21,7 por ciento).
Por el contrario, los vascos fueron los que menos tiempo pasaron en las salas de espera (8,1 por ciento), junto a los navarros (10,5 por ciento), cántabros (14,3 por ciento), asturianos (16,9 por ciento), baleares (19,2 por ciento), andaluces (20,5 por ciento), castellano leoneses (20,8 por ciento), aragoneses (20,9 por ciento) y riojanos (20,9 por ciento).
Ahora bien, a pesar de ello, el 60,9 por ciento del conjunto de los españoles calificó de “buena” la atención recibida y el 27,1 por ciento de “muy buena”. De hecho, el 69,4 por ciento reconoció que la asistencia fue “más o menos igual” de lo que esperaba, el 20,7 por ciento “mejor”, el 5,3 por ciento “peor” y el 3,6 por ciento “mucho mejor”.
En este punto, los ciudadanos de La Rioja son los que mejor califican dicha atención (46,9 por ciento) --marcaron la casilla de “muy buena”--, seguidos de los de Aragón (38,3 por ciento), los ceutíes (35,8 por ciento), asturianos (34,6 por ciento), castellano-manchegos (34,5 por ciento), madrileños (33 por ciento), cántabros (32,8 por ciento), baleares (31,8 por ciento), canarios (31,5 por ciento), navarros (31 por ciento), valencianos (30,1 por ciento), castellano leoneses (26,9 por ciento), gallegos (26,6 por ciento), catalanes (23 por ciento), vascos (21 por ciento), andaluces (20,7 por ciento), murcianos (19,6 por ciento), extremeños (18,1 por ciento) y melillenses (16,6 por ciento).
Los más sorprendidos favorablemente por el trato recibido por parte de su médico de familia, fueron los canarios (9,4 por ciento), aragoneses (8,7 por ciento), melillenses (7,6 por ciento), navarros (6,7 por ciento), riojanos (5,8 por ciento), ceutíes (5 por ciento), madrileños (4,5 por ciento), valencianos (4,5 por ciento), vascos (4,4 por ciento), asturianos (3,8 por ciento), castellano leoneses (3,3 por ciento), cántabros (3,2 por ciento), gallegos (2,9 por ciento), catalanes (2,9 por ciento), andaluces (2 por ciento), castellano-manchegos (1,7 por ciento), extremeños (1,2 por ciento), murcianos (0,9 por ciento) y baleares (0,5).
Por el contrario, los que recibieron una atención “peor” de la que esperaban fueron los cántabros (10,6 por ciento), extremeños (8,4 por ciento), aragoneses (8,3 por ciento), melillenses (7 por ciento), madrileños (6,4 por ciento), murcianos (5,8 por ciento), ceutíes (5,7 por ciento), canarios (5,7 por ciento), andaluces (5,5 por ciento), catalanes (5,3 por ciento), asturianos (5,1 por ciento), baleares (5,1 por ciento), castellano leoneses (4,9 por ciento), castellano-manchegos (4,4 por ciento), navarros (4,4 por ciento), valencianos (4 por ciento), vascos (4 por ciento), riojanos (3,8 por ciento) y gallegos (3,2 por ciento).
Más tiempo de espera en las salas de consultas de especialista
Respecto a las consultas con el médico de atención especializada, a nivel global el 31,6 por ciento aseguró haber esperado más de una hora para ser atendidos, siendo los ciudadanos murcianos los que más lo hicieron (50 por ciento), seguidos de los asturianos (48,4 por ciento), canarios (44,3 por ciento), aragoneses (43,6 por ciento), extremeños (41,8 por ciento), gallegos (39,6 por ciento), cántabros (38,9 por ciento) y ceutíes (38 por ciento).
Posteriormente se sitúan los riojanos (35,7 por ciento), castellano-manchegos (35,4 por ciento), andaluces (34,8 por ciento), castellano leoneses (33,8 por ciento), melillenses (32,7 por ciento), valencianos (30,7 por ciento), madrileños (27,7 por ciento), catalanes (23,8 por ciento), vascos (17,1 por ciento), baleares (12,7 por ciento) y navarros (6,2 por ciento).
El 62,5 por ciento de los españoles calificó de “buena” la asistencia ofrecida por el profesional especializado y el 20,8 por ciento de “muy buena”. En este punto, el trabajo refleja que los ciudadanos más satisfechos fueron los aragoneses (35 por ciento), navarros (33,8 por ciento), asturianos (32 por ciento), riojanos (31,3 por ciento), castellano-manchegos (25,1 por ciento), ceutíes (24,1 por ciento), madrileños (23 por ciento), cántabros (22,1 por ciento), extremeños (21,6 por ciento), catalanes (21,4 por ciento), valencianos (20,4 por ciento), andaluces (19,1 por ciento), vascos (18,8 por ciento), baleares (17,8 por ciento), canarios (17,7 por ciento), castellano leoneses (15,3 por ciento), murcianos (14,5 por ciento), melillenses (14 por ciento) y gallegos (10,1 por ciento).
Preguntados por si se superaron o no sus expectativas sobre la atención, a nivel general, el 60,3 por ciento dijeron que fue “más o menos igual”, el 23,4 por ciento “mejor”, el 9,4 por ciento “peor” y el 4,6 por ciento “mucho mejor”.
Los que más sorprendidos positivamente, es decir, aquellos que reconocieron que la atención recibida fue “mucho mejor” de la esperada, fueron los navarros (11,6 por ciento), canarios (10 por ciento), aragoneses (8,6 por ciento), madrileños (7,2 por ciento), ceutíes (6,5 por ciento), valencianos (6,4 por ciento), riojanos (5,1 por ciento), castellano-manchegos (4,8 por ciento), melillenses (4,7 por ciento), castellano leoneses (4,7 por ciento), gallegos (4 por ciento), vascos (3,5 por ciento), catalanes (3,2 por ciento), asturianos (3,1 por ciento), extremeños (2,2 por ciento), cántabros (2,1 por ciento), baleares (1,7 por ciento), andaluces (1,3 por ciento) y murcianos (0,8 por ciento).
Por el contrario, los más insatisfechos, conforme a lo que esperaban antes de entrar a la consulta, fueron los canarios (15,2 por ciento), aragoneses (15 por ciento), asturianos (14,1 por ciento), valencianos (12,3 por ciento), cántabros (11,6 por ciento), madrileños (11,5 por ciento), andaluces (8,5 por ciento), riojanos (7,9 por ciento), castellano-manchegos (7,8 por ciento), catalanes (7,7 por ciento), baleares (7,6 por ciento), extremeños (7,5 por ciento), gallegos (7,4 por ciento), castellano leoneses (7,3 por ciento), melillenses (7,1 por ciento), ceutíes (5,6 por ciento), murcianos (5,6 por ciento), navarros (5,4 por ciento) y vascos (4,7 por ciento).
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