Asociaciones feministas se concentran un año después de la muerte de una mujer en el prostíbulo Tres Marqueses

Kirké y Feministas de La Rioja han convocado una concentración por el aniversario de la muerte de la mujer en el prostíbulo Tres Marqueses, la concentración tendrá lugar el sábado 4 de mayo frente a la Delegación del Gobierno en La Rioja a las 12:30. Y es que, tal y como recuerdan estas asociaciones feministas, “se cumple un año de la muerte de una mujer en situación de prostitución en el prostíbulo Tres Marqueses de Recajo”.

Y un año después, dicen, “no sabemos más detalles sobre lo sucedido ni conocemos las conclusiones de la investigación”. Por esta razón, y con esta concentración quieren “expresar públicamente que no la olvidamos. Queremos alertar sobre situación de vulnerabilidad y abandono que sufren las mujeres prostituidas en estos locales, pero también en pisos a lo largo y ancho de nuestra comunidad autónoma. Sus muertes ni siquiera se contabilizan en las cifras oficiales de violencia de género, cuando en muchas ocasiones son víctimas directas de hombres que consideran que pueden hacer con ellas lo que quieran, incluso quitarles la vida”.

En otras ocasiones, prosiguen, “son ellas mismas las que ponen fin a su vida o mueren por sobredosis. La adicción a las drogas es una

constante y su salud mental está totalmente socavada por la exposición continuada a la violencia extrema. También en estos casos las instituciones tienen una responsabilidad al haberlas abandonado a su suerte, ya sea activamente o de forma pasiva, al no aumentar los recursos destinados a protegerlas ni garantizar la eficacia de los que ya existen“.

A lo largo del comunicado, Kirké y Feministas de La Rioja, también hacen referencia a las “continuas redadas que sacan a la luz la realidad, pero, a pesar de ello, los proxenetas siguen disfrutando de una enorme libertad y, sobre todo, tolerancia, tanto por parte de las autoridades como de toda la sociedad”. Y es que, aseveran que “mientras existan mujeres que sufran todo tipo de violencia atrapadas en estos «campos de concentración», como los denominan algunas activistas supervivientes, es imposible hablar de igualdad real de las mujeres”.

Y por todo ello, insisten en que defienden una “ley abolicionista del sistema prostitucional, que ponga a las mujeres en el centro para

ofrecerles todos los recursos necesarios, que persiga a proxenetas y puteros y que apueste por la educación con el fin de desactivar la demanda“.