El descontento de Zelaya
La resaca de la jornada electoral en Honduras no se ha hecho esperar y tras conocer los resultados de las urnas, el depuesto presidente, Manuel Zelaya, ha mostrado su descontento por la situación que viven él y su país.
Zelaya, que permanece refugiado en la Embajada de Brasil en Tegucigalpa, asegura que nada ha cambiado tras los comicios del domingo, “continúan las mismas autoridades, los mismos militares, el mismo presidente de facto, la misma Corte de Justicia y el mismo Congreso Nacional, la misma Fiscalía”.
Además, señala que “continúan amenazando la democracia hondureña, la cual ha mostrado serias debilidades porque hubo una abstención de más del 70%”, aportando datos de asistencia no verificados por las autoridades electorales.
El mandatario depuesto también ha tenido unas palabras para el ganador de las últimas elecciones, Porfirio Lobo, quien según Zelaya, “tiene miedo a los militares” y “no se pronuncia contra los golpes de Estado”. “Tiene miedo a las élites económicas, tiene miedo a las potencias internacionales que nos están imponiendo criterios, no habla de la independencia de Honduras frente a la manipulación contra Honduras”, asegura Zelaya en el diario on line Ecuador Inmediato.
A pesar de todo, Zelaya mostró su confianza en que Honduras logre vencer la crisis política que atraviesa y anticipó que “la razón y la verdad van a prevalecer sobre la mentira y el engaño”.
Por otro lado, Zelaya también ha criticado a Estados Unidos, ya que según él, la postura adoptada por la Administración estadounidense al reconocer las elecciones del domingo, representa un apoyo para el gobierno de facto de Roberto Micheletti. A juicio del mandatario depuesto, el gobierno de Estados Unidos “negoció” su posición haciendo tratos políticos con las autoridades interinas de Honduras.
Para Zelaya, apoyar “golpes de Estado como una solución a los problemas políticos en la región es un error muy grande porque significa otra vez la fuerza frente al debate político, algo que se había superado en la década de los ochenta”.
Por su parte, el ganador de las polémicas elecciones en Honduras, el opositor Porfirio Lobo, ha señalado que no emitirá ningún pronunciamiento sobre el eventual regreso del derrocado mandatario Manuel Zelaya, pues aseguró que él “ya es historia”.
“Yo estoy aquí alegre, viendo hacia al futuro y ustedes aquí [insistiendo con] 'Zelaya'. Ya Zelaya es historia, ya es parte del pasado”, sostuvo a un grupo de periodistas que le interrogaban sobre qué acciones piensa tomar con respecto al presidente depuesto.
“Este gobierno [el de Micheletti] tiene que terminar con todos los problemas que hay pendientes hoy [...] Si no se termina, si me queda a mí algo de resto, veremos que hacemos”, ha declarado Lobo.
El Congreso hondureño tiene previsto discutir el próximo 2 de diciembre sobre la restitución de Zelaya, en cumplimiento del acuerdo que fue mediado por Estados Unidos pero que fue declarado como “muerto” por el depuesto gobernante.
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