Las ONG ecologistas piden que no se construya el oleoducto de Balboa

Tras el vertido del buque ''SCF Caucasus'' el pasado 30 de julio, que ha podido afectar a las playas de Huelva, en especial a la del Parque Nacional de Doñana, las ONG WWF y Ecologistas en Acción presentarán esta semana en el Consejo de Participación del Espacio Natural, encargado de administrar el parque, una moción contra el oleoducto Balboa.

Según los ecologistas, el vertido del buque sobre las playas de Matalascañas y el Espacio Natural de Doñana, es la prueba más evidente del riesgo al que se enfrenta la provincia onubense, si finalmente se aprueba el proyecto de construcción del oleoducto y la refinería de Balboa.

El Consejo de Participación del Espacio Natural está obligado a revisar el informe favorable que emitió sobre este proyecto, aseguran ambas ONG.

A raíz del chapapote del ''SCF Caucasdus'' de bandera liberiana, se ha demostrado que un accidente en el futuro oleoducto o en la refinería de Balboa podría ser muy perjudicial para las playas vírgenes del sur de España.

“Este vertido demuestra que no existe la seguridad absoluta en materia de transporte y descarga de hidrocarburos. Por lo que en el caso del oleoducto Balboa tiene que primar el principio de precaución, no debiendo autorizarse su construcción, ya que los valores ambientales y económicos a proteger así lo exigen” apunta el responsable de la Oficina para Doñana de WWF, Juan José Carmona.

Ambas ONG esperan que la Consejería de Medio Ambiente, la Diputación de Huelva y el Ayuntamiento de Almonte, reflexionen y esta vez digan “no” a un proyecto que pone en peligro espacios naturales tan emblemáticos a nivel internacional como Doñana.

Las organizaciones defensoras del medio ambiente también han pedido a la Junta de Andalucía que informe sobre el vertido, las actuaciones llevadas a cabo por las autoridades y sus consecuencias sobre las playas de Matalascañas y el Parque Nacional.

Por último, las dos organizaciones solicitan una investigación a fondo para conocer la procedencia del chapapote y exigir responsabilidades a CEPSA.

Las treinta toneladas de crudo derramado procedente de la monoboya de la refinería de CEPSA en Palos de la Frontera no han alcanzado todavía las playas de Huelva, informó la subdelegación de Gobierno en Huelva, encargada de coordinar las labores de limpieza y controlar el avance del chapapote.