El proyecto de hotel de Revuelta puede tardar medio año

El empresario Félix Revuelta ha reconocido que todavía puede faltar medio año, “por lo menos”, para completar la tramitación del proyecto de construcción del hotel que pretende edificar en la plaza San Agustín de Logroño, en el edificio de Correos.

Revuelta anunció hace más de un año su intención de construir un hotel de lujo en la plaza de San Agustín, en el inmueble donde Correos mantuvo su edificio principal hasta que hace varios años lo cerró por problemas de cimentación detectados en una reforma.

Desde entonces, este empresario ha avanzado en su idea y ha llegado a visitar el interior del edificio, construido en 1932, con un equipo de arquitectos para analizar las posibilidades reales de construir este hotel.

Tras ese primer estudio, sus arquitectos han diseñado un proyecto para reformar ese edificio en un hotel de cinco estrellas, con 42 habitaciones, con una inversión de unos 15 millones de euros.

Pero, a pesar de los avances, “hay cosas que todavía tenemos que ver más en detalle, sobre todo los cimientos del edificio”, ha reconocido el empresario, que está decidido a “darle más prestigio a esa plaza” por medio del que sería el único hotel de cinco estrellas de la capital riojana.

Ha afirmado que, más allá de las cuestiones técnicas, el principal escollo con el que ahora se encuentra este proyecto es la burocracia.

Hasta junio pasado, él mismo admitía que tenía que esperar a la constitución del Ayuntamiento de Logroño y del Gobierno de La Rioja, tras las elecciones locales y autonómicas del 22 de mayo último, para exponer sus ideas a las nuevas autoridades.

Revuelta ha señalado que ya ha mantenido encuentros con dirigentes del Ejecutivo regional y de la Corporación logroñesa y “todos han sido receptivos. El proyecto gusta”.

El siguiente paso es dialogar con el Ministerio de Fomento, que es el propietario del edificio, con el fin de que solicite al Ayuntamiento el cambio de uso de la parcela, para que en ella se pueda construir una dotación privada, en lugar del edificio público que ahora existe.

Posteriormente, con el cambio de calificación conseguida, Fomento tendrá que poner precio a la parcela, algo que Revuelta espera que se realice “con criterio” porque “no digo que me la regalen, pero en el momento actual yo propongo construir una dotación y crear puestos de trabajo”, alrededor de medio centenar, ha dicho.

En cualquier caso, el empresario teme que la situación política de España, “con unas elecciones generales por delante”, pueda dilatar el proceso y prolongarlo más allá del medio año que sus técnicos han calculado, pero tratará de que se hagan antes.

Revuelta ha insistido en que está decidido, aunque existan retrasos, a que “en menos de dos años Logroño pueda tener ese hotel, que va a ser magnífico y una referencia”.