Más interrupciones y tensión

Los candidatos del PSOE y el PP a la Presidencia, José Luis Rodríguez Zapatero y Mariano Rajoy, se interrumpieron en numerosas ocasiones en este último 'cara a cara' antes de las elecciones del próximo 9 de marzo, más que en el duelo de hace una semana, si bien la moderadora, Olga Viza, sólo intervino para recordar el tiempo que les restaba para la conclusión de su turno de palabra, cuyos tiempos tanto Zapatero como Rajoy respetaron escrupulosamente.

Durante este segundo debate, ambos candidatos volvieron a protagonizar diversos momentos de tensión, sobre todo en los bloques económico y de seguridad, donde el proceso de negociación con ETA volvió a enzarzar a ambos aspirantes, al igual que en el primer duelo dialéctico.

Durante el primero de los cinco bloques, el económico, Zapatero y Rajoy dieron vueltas sobre si el contenido de la primera pregunta que el líder del PP dirigió al presidente del Gobierno durante la primera sesión de control al Gobierno en el Congreso de la legislatura era o no económica, una cuestión que se recriminaron en varias ocasiones a lo largo de los diferentes apartados que conformaron el debate.

En ese debate parlamentario, que tuvo lugar el 12 de mayo de 2004, Rajoy se interesó en conocer la valoración de Zapatero de sus primeros días al frente del Gobierno, según se recoge en el Diario de Sesiones del Congreso de los Diputados.

TIRARON DE GRÁFICOS Y RECORTES DE PERIÓDICOS.

Ambos presidenciables se sirvieron de diversos gráficos para explicar mejor cada unos de los datos económicos a los que hacían referencia, aunque en este punto cabe destacar que los utilizados por el candidato 'popular' fueron esta vez más grandes y, por tanto, mucho más visibles para los televidentes que hace una semana.

Este apartado vino precedido por la introducción que ambos candidatos realizaron dirigiéndose a la cámara en un plano fijo. Lo más significativo de este bloque fue cuando el presidente del Gobierno confesó haber llevado consigo un “libro blanco” con todos los datos que expuso en el debate anterior y los que presentó en este segundo, los cuales, según anunció, podrán ser consultados por los ciudadanos a partir de mañana en Internet.

Los aspirantes a ocupar La Moncloa también tiraron de recortes de periódicos en el bloque dedicado a la seguridad y la política exterior, durante el que ambos se interrumpieron en numerosas ocasiones, sobre todo cuando el presidente del PP le acusó de haber “mentido” a los españoles a propósito del proceso de negociación con ETA. “Nunca jamás”, le replicaba reiteradamente Zapatero. En este bloque también se vivieron momentos de tensión cuando salió a la palestra el tema de la guerra de Irak.

La moderadora les llegó a sugerir a ambos ponentes a continuar, si así lo deseaban, con este apartado para exponer sus conclusiones. Zapatero comentó entonces que, al inicio del siguiente apartado, dedicado al modelo de Estado, podrían recuperarlo, si bien no se volvió a hacer referencia a ninguno de los temas que se recriminaron con anterioridad.

REPITEN SUS DESPEDIDAS.

La misma dinámica de interrupciones y de utilización de gráficos continuó en el resto de bloques en los que se dividió el debate, que concluyó con sendos epílogos, donde volvieron a dirigirse directamente a los ciudadanos, también en un plano fijo.

En esta ocasión, Zapatero se despidió nuevamente con el mismo 'Buenas noches y buena suerte' que utilizó para finalizar su discurso en el primer 'cara a cara' emulando al actor David Strathairn en su memorable papel de Edgard R. Murrow en la película con el mismo título. La semana pasada, el presidente del Gobierno ya explicó que, con esta frase trató de hacer “un guiño a la libertad de expresión” y a la inteligencia del espectador“.

Por su parte, Rajoy también volvió a hacer referencia a la comentada niña que utilizó en su despedida en el primer debate televisivo. De ella dijo que está “en su cabeza y en su corazón”, tal y como reza el lema de campaña del PP.

Tras las despedidas, la moderadora del debate agradeció la confianza depositada en la Academia de la Televisión para la celebración de ambos debates y manifestó “el deseo general” de que “no tengan que pasar otros quince años” para que se repitan este tipo de 'cara a cara'.