WWF denuncia “carencias” en la política forestal
La organización ecologista WWF denunció hoy las “carencias” de las políticas forestales españolas en gestión forestal, para que el bosque sea menos vulnerables a los grandes incendios, ya que en los primeros siete meses del año ardieron más de 70.000 hectáreas, que equivalen a unas pérdidas de 385 millones de euros.
Además, la ONG subrayó que en solo 22 siniestros forestales de los casi 10.000 ocurridos en lo que va de año, ardió más de la mitad de toda la superficie incendiada, lo que convierte a 2009 en el segundo peor año del decenio en cuanto a superficie afectada y por número e impacto de los grandes incendios forestales.
Así, indicó que los 22 últimos siniestros de los 9.915 sucedidos equivalen al 0,22 por ciento del total y en ellos ardió más del 50 por ciento de las hectáreas arrasadas por el fuego. De este modo califica la situación de “crítica”, a pesar de reconocer la eficacia en los dispositivos de extinción, ya que meteorológicamente hablando este era un año muy favorable para evitar el fuego, en el que los retenes consiguieron controlar en fase de conato más del 58 por ciento de los siniestros.
“Es imprescindible avanzar en estrategia política para acabar con esta amenaza”, apostilló hoy la organización, que celebró que no haya empeorado la eficacia de los medios de extinción, a pesar de lo que hasta la fecha se han producido 1.200 incendios más que en 2008. Por tanto, WWF exige reforzar la presión judicial y desarrollar en España una política forestal que dinamice el bosque como motor de un modelo socioeconómico sostenible con el medio rural.
Por otro lado, la ONG valoró el impacto económico por las más de 70.000 hectáreas quemadas hasta la fecha en 385 millones de euros, sin contar con los gastos en prevención y extinción. En su informe 'Incendiómetro 2009' WWF observa “graves deficiencias” entre las diferentes comunidades autónomas en cuanto al esfuerzo de inversión y de gestión forestal.
En relación con el número de siniestros de la primera mitad del año (9.915), considera la cifra como “muy elevada” ya que es solo un cuatro por ciento inferior a la media del decenio pero un 22 por ciento por encima de la de 2008 y casi el doble que la registrada en el mismo periodo de 2007. Hasta la fecha, este incremento sitúa a 2009 como el segundo peor año del decenio en cuanto a superficie afectada y el peor por número e impacto de los grandes incendios forestales.
El responsable del Programa de Bosques de WWF España, Félix Romero, valoró que “a pesar de estos datos” si en los próximos seis meses no se registraran más incendios, 2009 “aún podría ser el segundo mejor de la década en cuanto a superficie quemada, con 70.000 hectáreas”, y para conseguirlo urge a la sociedad española a evitar originar incendios por descuidos y a colaborar con los medios del Estado para “disuadir a los incendiarios y facilitar su identificación y detención”.
Finalmente, la ONG agradece la labor de profesionales y voluntarios que luchan contra incendios forestales y lamenta la pérdida de las vidas humanas que se ha cobrado este año el fuego en España.
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