Multa de 69.000 euros y orden de cierre durante 12 meses para Moroder, el after de San Hermenegildo

Los after hours aparecen y desaparecen de forma recurrente en Malasaña. El último en caer es el Moroder, el local de la calle San Hermenegildo al que el Ayuntamiento se propone tumbar a multas. Hasta 21 sanciones ha puesto a este espacio el área de Medio Ambiente en diferentes inspecciones, publica este martes el diario ABC.

Los responsables del Moroder camuflaron su actividad bajo bajo el nombre de Asociación Cultural Fernando VI Sound Club para despistar a las autoridades y seguir operando, presentando una declaración responsable para eludir el cambio de normativa que desde el mes de mayo ha puesto en jaque a locales que funcionan como after hours sin tener licencia para poner música antes de las 10.00 horas.

Sin embargo, el Ayuntamiento envió a inspectores que levantaron actas por ruido cerca de las viviendas y por poner música más allá del horario permitido. En total sus impulsores tendrán que pagar 69.000 euros en multas y cerrar el local durante 12 meses.

El cambio legal al que se hace referencia es el que tuvo lugar en el decreto que rige la Ley de Espectáculos Públicos y Actividades Recreativas (Lepar), gracias al que el Ayuntamiento de Madrid puede sancionar con más efectividad a los propietarios de los after, locales que abren a las 6.00 de la madrugada bajo una licencia de cafetería y que en realidad funcionan como discotecas hasta al menos el mediodía. Es el caso de locales como el after de Jesús del Valle, el Garaje Café, que ha sido clausurado en varias ocasiones durante los últimos años y que volverá a tener que cerrar por orden municipal, además de pagar una cuantiosa multa.

Hasta el pasado mayo, las multas de la Agencia de Actividades apenas tenían efectividad ya que los tribunales habían sentenciado que su licencia les permitía a estos negocios ejercer su actividad. Pero ahora les controla y sanciona la Dirección General de Sostenibilidad y Control Ambiental, que levanta actas de infracciones graves en cada visita por, por ejemplo, poner música sin disponer de permiso para ello. Fruto de estas multas tendrán que cerrar locales como el Soniquete de Chamberí o el Astronautas Jaguerground en Chueca-Salesas.