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El PSN decidirá quién gobierna

Pedro Sánchez en Pamplona, rodeado por Santos Cerdán, María Chivite y Maite Esporrín (dcha.).

Endika Núñez

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Estos datos los proporciona un modelo estadístico que hemos elaborado para tratar de aproximarnos a lo que ocurrirá el próximo 26 de abril. El modelo está basado en encuestas, que los agrega, los corrige –según tamaño de muestra, fecha de realización del trabajo de campo y empresa demoscópica— y les añade incertidumbre. Este último paso es determinante. Se trata de cuantificar qué error se esperan de los sondeos y simular 10.000 elecciones.

Según este análisis, la coalición entre UPN, PP y C’s (Navarra Suma) obtendría el 29,6% de los votos y 16 escaños. Le seguiría Geroa Bai, con un 18,5% en intención de voto y 10 escaños. A tan sólo un punto y medio esta el partido de María Chivite, el PSN, con un 17,1% de los voto y 9 escaños. Por su parte, EH Bildu obtendría 15,2% de los votos y 8 escaños, Podemos 8,15% y 4 escaños e Izquierda-Ezkerra 4,3% y 2 escaños.

Además, Vox entraría en el Parlamento de la Comunidad Foral por la mínima, un 3% de los votos, y se haría con un escaño. A falta de una semana para la celebración de las elecciones, habrá que ver cómo evolucionan en intención de voto los diferentes partidos, con especial énfasis en Vox, que podría quedarse fuera con una ligera caída en intención de voto, o conseguir un segundo escaño si es capaz de mejorar su resultado un uno por ciento.

Como estos altibajos suelen ser habituales, es interesante observar la composición de mayorías en la Comunidad Foral desde un punto de vista probabilístico. Asumir que las encuestas pueden fallar hasta 5 o 6 puntos porcentuales y simular las elecciones.

En el siguiente gráfico se pueden observar las probabilidades de sumar mayorías.

Estos son los cinco escenarios principales:

  • Cuatripartito: La actual composición de gobierno entre GBai, EHB, UP y I-E sumaría la mayoría absoluta en 1 de cada 7 ocasiones (15%). Quedarían a dos escaños de la mayoría absoluta (26) y sería imprescindible la participación –activa o pasiva—del PSN.
  • Cuatripartito + PSN: Los socialistas navarros sumarían dos escaños más que en la pasada legislatura y les sería suficiente para determinar cualquier tipo de gobierno. En este caso, un apoyo del PSN al Cuatripartito sumaría mayoría absoluta 9 de cada 10 ocasiones, es decir, el 90% de las veces.

Aunque quedaría por ver qué equilibrio de fuerzas constituyen el nuevo parlamento, ya que si al final María Chivite consigue superar a Uxue Barkos en intención de voto podría cambiar el escenario actual y terminar presidiendo el Gobierno de Navarra.

  • Izquierdas no soberanistas: En relación con el escenario anterior, si los socialistas superaran a Geroa Bai, podrían optar por un gobierno de izquierdas que genera más simpatías en Ferraz. Pero esta composición no es probable que sume la mayoría, sólo lo conseguiría en 1 de cada 100 ocasiones.
  • Progresista: Por tanto, e independientemente cual sea el orden de los partidos en porcentaje de votos, el PSN podría pedir la ausencia de partidos soberanistas como contraprestación a su apoyo a un gobierno progresista. Este escenario podría darse en hasta 8 de cada 10 ocasiones y daría paso a un nuevo cuatripartito con PSN y sin EH Bildu.
  • Gran coalición: Sin duda, matemáticamente es una de las posibilidades. Un gobierno o una investidura de Navarra Suma apoyada por el PSN ocurriría en 8 de cada 10 ocasiones (80%). Habría que ver, eso sí, cómo terminaría desequilibrando la balanza el PSN, ya que podría optar por diferentes gobiernos de diferentes colores.
  • Derechas: Un gobierno formado por Navarra Suma y Vox no sería posible a no ser que hubiera una gran sorpresa y el partido de ultraderecha entrara con mucha fuerza en el Parlamento. No parece que sea así, y, por tanto, las derechas sólo sumarían 26 escaños en 2 de cada 100 veces. Una posibilidad remota.
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