La nueva renta garantizada, a falta de financiación presupuestaria suficiente

El debate sobre la renta básica es siempre intenso en la Comunidad foral. Son ya varias las leyes que lo han regulado en la última década y al encendido debate político que suscita se une otro más trascendente, el de los afectados por los cambios normativos. El año pasado, 12.875 familias recibieron esta renta. Esto representa que casi 29.000 personas están pendientes en la actualidad de si la nueva regulación que elabora el Gobierno que preside Uxue Barkos les permitirá o no seguir siendo perceptores de la renta básica, y si las nuevas ayudas serán mayores o menores de las que reciben hasta el momento.

Tras la presentación de un primer borrador de ley, el departamento de Derechos Sociales que dirige el vicepresidente Laparra se encontró con la oposición de los propios socios de Gobierno, con la de la plataforma de usuarios de renta básica y con la de los grupos de la oposición parlamentaria. Laparra renegoció aquel borrador inicial con sus socios y llegaron a un acuerdo que ha calmado, en parte, las quejas de los usuarios y ha mitigado también las críticas de la oposición política. La única duda que no ha despejado Laparra es la de cómo piensa financiar su nueva renta garantizada.

El coste total

El coste totalLa partida presupuestaria de la que se financia esta ayuda está consignada con 57 millones de euros para este año. Sin embargo, el coste estimado para la nueva renta garantizada es de 65 millones. Desde el departamento restan importancia a este hecho. En primer lugar, porque esos 65 millones de coste son sólo una estimación y, además, porque al tratarse de una prestación garantizada, “el Gobierno de Navarra tiene la obligación de hacerla efectiva”. Es decir, que si a lo largo del año el Gobierno comprueba que los 57 millones no son suficientes para la cobertura que la nueva ley prevé, tendrá que detraer recursos de otras partidas presupuestarias para poder pagar la renta garantizada. ¿De dónde sacará el dinero? Nadie se atreve a dar una respuesta directa a esta pregunta. “Siempre se ha pagado”, observan desde el departamento.

Lo cierto es que la infra dotación de esta partida presupuestaria ha sido una constante a lo largo de los años. En 2015, sin ir más lejos, la partida tenía consignados 37 millones. Y el coste de la renta básica alcanzó los 63,8. Todos los perceptores con derecho a cobrar esta ayuda la recibieron. En menos de diez años, la inversión de las arcas públicas en renta básica en Navarra se ha multiplicado por 10.

Más perceptores este año

Más perceptores este añoA pesar de que los indicadores estadísticos apuntan a un cierto estancamiento de la creciente pobreza en Navarra durante los últimos años, el departamento que dirige Laparra sabe que su nueva ley de Renta Garantizada supondrá un aumento de los perceptores de esta ayuda. Y es que, entre las novedades más relevantes que incluye su proyecto de ley, está la de incluir entre los beneficiarios a las personas de más de 65 años (hasta ahora sólo accedían a la renta básica los que tuvieran cargas familiares) o la de no incluir la residencia legal en el país entre los requisitos para poder cobrarla, siempre y cuando se acrediten dos años de residencia en Navarra o un año en el caso de las familias con menores a su cargo.

Según se desprende de los datos que cada año facilita del departamento de Asuntos Sociales, el número de familias navarras que ha recibido renta básica durante estos tres últimos años superó al de familias de otras nacionalidades beneficiarias de esta ayuda en una proporción de dos a uno.

El debate político

El debate políticoEn el acuerdo programático que dio lugar al Gobierno que dirige Uxue Barkos se recogen varios puntos relacionados con la renta básica. El debate entre los propios socios de Gobierno sobre si el anteproyecto de Laparra cumple o no lo acordado ha pasado de la acritud en las críticas a la imagen pública de acuerdo, si bien es cierto que el pacto no se cumple en su literalidad. Para empezar, el cuatripartito apostaba por implantar una renta garantizada universal. “Esto no significa que se vaya a pagar una renta a todos los navarros, sino que se va a pagar a todas las personas que tengan derecho a ella, y eso ocurre, es universal”, apuntan desde el Gobierno. En segundo lugar, el acuerdo programático prometía reducir de dos a uno el año acreditado de residencia en Navarra para poder acceder a la renta básica. Este punto se cumple sólo a medias, ya que se mantiene la exigencia de dos años para todos los perceptores excepto para las familias con menores a su cargo, colectivo que sólo deberá acreditar un año de residencia.

Por último, el acuerdo programático establecía que la cuantía mínima  que cobrasen los beneficiarios partiría de la referencia del Salario Mínimo Interprofesional (650 euros al mes este año). Tampoco este punto se cumple, ya que los socios del cuatripartito han acordado una variación en las percepciones de la renta que supone reducir de 655 a 600 euros mensuales la renta de las familias unipersonales.

Quién cobrará menos

Quién cobrará menosLa nueva tabla de cuantías de renta básica en función del tipo de perceptor que contempla el anteproyecto de Laparra ha supuesto una tremenda “decepción” para la Plataforma por la Renta Básica. El cambio más importante pasa por rebajar a 600 euros la renta que recibirán las familias unipersonales (5.800 personas el año pasado), que este año contarán con 55 euros menos al mes. También los grupos de la oposición han calificado este hecho como un recorte en la prestación y denuncian que afecta a casi la mitad de los perceptores de la Renta Básica. El dato, objetivamente, no es exacto: las 5.800 personas que recibieron la renta básica el año pasado como núcleos familiares unipersonales representan, en realidad, el 20% de los perceptores, frente a las 23.200 personas que recibieron esta ayuda como unidades familiares de dos o más personas. Lo cierto es, por tanto, que la cuantía de la renta básica bajará este año para el 20% de las personas que tienen derecho a recibirla.

No lo ve así la Plataforma por la Renta Básica, que en una dura rueda de prensa contra el cuatripartito, denunció sentirse engañada por el Gobierno, a pesar de haber trabajado la pasada legislatura con los cuatro partidos para ejercer la oposición al Gobierno de UPN. Primer incumplimiento: la ley no se ha aprobado en los seis primeros meses de gestión, como prometieron. Laparra espera tener su anteproyecto en vigor para este verano. Segundo y tercer incumplimientos: se mantiene el requisito de acreditar dos años de residencia, cuando se había prometido rebajarlo a uno, y las cuantías no tienen como referencia el SMI. Cuarto incumplimiento, las familias unipersonales, que son casi la mitad de los hogares perceptores, verán rebajada la cuantía de su renta.

En la rueda de prensa ofrecida por la Plataforma por la Renta Básica, prestaron testimonio tres personas a las que la nueva normativa del cuatripartito va a perjudicar. Una de ellas era un parado de larga duración que forma familia unipersonal y las otras dos eran familias a quienes perjudica el requisito de acreditar dos años de residencia en Navarra.

En contraposición a estas dramáticas situaciones, la nueva renta garantizada incrementará la cuantía que reciben al mes el 80% de las personas beneficiarias de esta ayuda. En concreto, las familias de dos personas cobrarán 810 euros (frente a los 786 actuales), las de tres miembros tendrán una renta de 960 euros (frente a los 851 actuales), las de cuatro miembros accederán a una renta de 1.050 euros (frente a los 917 actuales), las de 5 miembros cobrarán 1.140 euros (frente a los 982 actuales) y las de 6 o más miembros cobrarán 1.200 euros (frente a los 982 que cobran en la actualidad).

¿Por qué ha adoptado el Gobierno este criterio? El vicepresidente Laparra lo explica con datos: De los casi 29.000 beneficiarios de la renta básica el año pasado, 10.820 eran menores de edad (es decir, el 38% de las personas que se benefician de la renta básica son menores de edad). Y todos ellos pudieron beneficiarse de esta ayuda gracias a estar inserto en algún núcleo familiar de dos o más personas. Laparra mantiene, además, que la pobreza en este tramo de edad es un 56% superior al resto, por lo que incrementar al alza las cuantías de renta básica que reciben las familias de dos o más miembros significa facilitarles más recursos para combatir la pobreza infantil.

Otras novedades

Otras novedadesAl margen de las cuantías de la renta, el anteproyecto de Laparra incluye otras novedades como la de eliminar el límite de 30 meses para cobrar la prestación, de forma que podrá percibirse la renta básica mientras subsista la situación de necesidad. Además, con la nueva ley será compatible percibir ciertos ingresos (hasta 300 euros) y seguir recibiendo la renta básica. A partir de dicho tope exento, los perceptores recibirán una parte proporcional de la cuantía de renta que les corresponda. Otra de las novedades que introduce la ley consiste en poder suspender temporalmente el cobro de la renta garantizada cuando el beneficiario consiga un trabajo y, si después vuelve a quedarse en el paro, volver a darle de alta en el sistema de renta garantizada sin tener que iniciar todo el proceso administrativo correspondiente.

Otro de los aspectos en los que la nueva ley del cuatripartito flexibiliza los requisitos para acceder a la renta básica afecta a las unidades familiares que comparten vivienda. Cada vez es más frecuente el reagrupamiento familiar en una única vivienda, y hasta ahora los perceptores de la renta en esta situación recibían como tope mensualidad y media. Con la nueva ley, cada familia recibirá la renta mensual que le corresponda de acuerdo a su número de miembros, con un límite de tres rentas por hogar.