Johnson compara la muerte de Khashoggi con el ataque con Novichock

El exministro de Asuntos Exteriores británico Boris Johnson equiparó hoy la muerte del periodista saudí Jamal Khashoggi en el consulado de su país en Estambul (Turquía) el pasado 2 de octubre, con el ataque al exespía ruso Serguéi Skripal con Novichok en marzo en Salisbury (Inglaterra).

En un artículo publicado en “The Daily Telegraph”, el político conservador tildó ambos sucesos de “complots patrocinados por el Estado” y diseñados para “aterrorizar” a los oponentes.

Johnson, quien renunció a su cargo en la cartera de Exteriores del Gobierno del Reino Unido el pasado mes de julio, urgió a su país a no hacer “la vista gorda” con el “asesinato” de Khashoggi, al tiempo que presionó a Arabia Saudí a poner fin a la “brutal” guerra civil de Yemen.

Arabia Saudí reconoció el pasado fin de semana que el periodista, que había entrado al consulado saudí en Estambul el 2 de octubre, murió durante una “pelea” con funcionarios de la legación diplomática.

Medios turcos y estadounidenses, sin embargo, sospechan que Khashoggi fue torturado y asesinado por un equipo saudí que había llegado a Estambul para interrogarlo.

Los comentarios de Johnson vienen después de que el también exministro británico de Exteriores Jack Straw asegurara hoy en la cadena BBC Radio 4 que se necesita una “acción firme para reducir el poder desestabilizador del príncipe heredero de Arabia Saudí, Mohammed Bin Salman”.

Para Straw, Bin Salman es el “arquitecto de la inestabilidad” en Arabia Saudí y opinó que la política británica, así como del resto de estados europeos y de Estados Unidos debería orientarse para “debilitar su poder”.

Por su parte, Johnson afirmó que el príncipe saudí tiene la “oportunidad” de apadrinar la paz y de salvar a su país de “la amenaza de ataques con misiles”.

“Ahora es el momento de que actúe”, agregó, mientras recordó los intereses comunes y la histórica relación de amistad entre el Reino Unido y Arabia Saudí.

Con todo, señaló que “en momentos como este” es el trabajo “de un amigo” el “decir la verdad” y la verdad es que “el asesinato de Khashoggi fue un acto bárbaro”.

La portavoz de Exteriores del Partido Laborista, Emily Thornberry, que desde hace tiempo aboga porque el Reino Unido frene la venta de armas a Arabia Saudí, declaró hoy que “depende de ellos cambiar su comportamiento”.

“Depende de nosotros enfrentarnos a ellos y depende de nosotros dejar claro que no aceptamos este comportamiento y que necesitan cambiar su formas”, agregó.

Mohammed Bin Salman visitó el pasado mes de marzo el Reino Unido, viaje que despertó las críticas por la venta de armas por parte de Londres a Riad, que lidera la coalición militar árabe en el conflicto del Yemen.