La ONU pide aprovechar el “impulso” para poder cerrar la guerra en Siria

La ONU afirmó hoy que es necesario aprovechar el “impulso” político actual con el fin de buscar un final al conflicto armado de Siria, en vísperas de una negociación clave que se llevará a cabo en Viena.

“No podemos perder este impulso”, afirmó el enviado especial de la ONU a Siria, Staffan de Mistura, en declaraciones a los periodistas tras hacer una evaluación del conflicto en una reunión a puerta cerrada del Consejo de Seguridad de la ONU.

El próximo sábado está convocada en Viena una nueva ronda de reuniones ministeriales, que siguen a las que se celebraron el 30 de octubre, para impulsar una solución política al conflicto armado de Siria, que estalló en 2011 y ha causado más de 200.000 muertos.

La ONU no preside estas negociaciones, que están encabezadas por Estados Unidos y Rusia, pero De Mistura insistió en que Naciones Unidas está listo “para apoyar cualquier decisión que se tome en Viena”.

“Mi mensaje tiene sólo una palabra: impulso”, agregó el enviado especial de la ONU a Siria, y dio a entender que la situación actual representa un avance sobre la falta de avances de los últimos meses para buscar una solución a ese conflicto.

De Mistura una sido una de las personalidades más volcadas en ese propósito, pero propuestas suyas, como crear una zona libre de violencia en la ciudad de Aleppo y sus alrededores, no han tenido el eco suficiente.

Ahora, dijo, es “la labor de los países grandes, como Rusia, como Arabia Saudí y como Irán, para que vengan a la mesa y encaminen un proceso político”.

“Hemos intentado en los últimos cuatro años y nunca funcionó. Ahora es el momento de que los países asuman esos desafíos”, afirmó el representante de la ONU.

En la última reunión ministerial participaron, además de Estados Unidos y Rusia, representantes de Irán, Turquía y Arabia Saudí, entre una veintena de naciones, pero no acudieron delegados del Gobierno sirio ni de los grupos de oposición.

De Mistura se mostró confiado acerca de este diálogo en Viena, y dijo que desde mañana se formarán subgrupos que analizar tres áreas que están pendientes de definir: qué grupos pueden calificarse como terroristas y cuáles son de oposición, así como temas humanitarios.

Posteriormente, el jefe de la misión británica ante la ONU, Matthew Rycroft, cuyo país preside este mes el Consejo de Seguridad, expresó el “pleno respaldo” de ese órgano de Naciones Unidas a las negociaciones de Viena.

Ese diálogo, agregó el diplomático, busca “hacer realidad” y la “implementación total” del Comunicado de Ginebra de 2012, que fijó líneas para resolver el conflicto sirio, incluyendo la formación de un gobierno de transición con integrantes del régimen de Bachar al Asad y de los grupos de oposición.

Ese comunicado fue suscrito el 30 de junio de 2012 por los cinco países con asiento permanente en el Consejo de Seguridad (Estados Unidos, Rusia, China, Francia y el Reino Unido), más Turquía, la Liga Árabe, la ONU y la Unión Europea.

Como parte de las negociaciones previas a la reunión de Viena, el viceministro ruso de Exteriores, Mijail Bogdánov, se reunió hoy en Moscú con representantes de Irán y de la oposición moderada de Siria.

Rusia viene defendiendo a Bachar al Asad por la lucha que mantiene para evitar una expansión de grupos extremistas islámicos, y promueve un nuevo proceso electoral que culmine con la instalación de nuevas autoridades.