La “desvertebración” de Estados sería “gran error” para el futuro de la UE

El secretario general del Comité Económico y Social Europeo (CESE), Luis Planas, apeló a la política con “mayúscula” para resolver el “tema” de Cataluña, y advirtió del peligro de la “desvertebración” de los Estados nacionales en Europa.

“Los españoles tenemos que ser capaces de resolver el tema de Cataluña porque si no lo somos también va a tener consecuencias sobre nuestro peso especifico en Europa”, dijo en una entrevista con Efe Planas (Valencia, 1952), con 35 años de experiencia en instituciones comunitarias.

En su opinión, “todo el mundo entiende que los tribunales tienen que jugar su papel, pero también entiende que tenemos que ser capaces, y para eso sirve la política cuando es noble y funciona con mayúscula, de llegar a acuerdos que nos permitan salir adelante”.

“Sería un gran error para el futuro de Europa ir a la desvertebración de los Estados nacionales”, añadió Planas, y puntualizó que no hablaba “desde una perspectiva europea”.

“La historia de Europa está llena de esas situaciones en los pasados dos siglos y ya vemos como han acabado”, recordó el político y diplomático, quien desde enero de 2014 está al frente de la secretaria general del CESE, órgano consultivo de la UE que acaba de celebrar su 60 aniversario como “puente” entre la sociedad civil y las instituciones europeas.

Lo primero que está claro para Planas es que “hay que respetar las normas”, tanto las nacionales como las europeas, y “si se cambian tiene que hacerse dentro de las normas”.

“Creo que se pueden admitir todas las formulas constitucionales, desde Estados federales, semifederales, regionalizados o centralizados, pero lo importante es que el conjunto somos una unión de Estados, que funciona bajo el principio del respeto mutuo, eso significa confianza mutua, pues todos somos Estados democráticos que respetamos las libertades mutuas”.

Lo segundo, añadió, es que “el camino es el de la unión y la integración, no el de la disgregación”.

El de España no es un caso único: “hay al menos cinco o seis miembros de la UE y probablemente más en los que cualquier proceso de tensión fuerte tendría consecuencias negativas no solo para su unidad nacional sino también para el proyecto europeo”, afirmó.

Y Europa se encuentra ahora, además, en un “dilema”, ya que al “brexit”, que se consumará a finales de marzo de 2019 con la salida del Reino Unido, se suman las “muchas polémicas” que ha habido entre “ampliación y profundización” surgidas en los últimos años al calor de las sucesivas y rápidas ampliaciones hacia el Este de Europa.

Para Planas no hay duda de que “hicimos lo que teníamos que hacer” ampliando la UE tras la caída del telón de acero y de la URSS, ya que de lo contrario “el resultado habría sido mucho peor”.

Ahora países de los Balcanes están llamando a la puerta de la UE, donde las últimas acogidas en su seno fueron Eslovenia y Croacia.

“Es un debate muy difícil porque al comienzo de la Comisión (de Jean-Claude) Juncker se dijo claramente que no iba a haber una ampliación. Pero es muy difícil resolver el dilema porque hay algunos países que están muy activos en los Balcanes, desde el punto de vista económico, China, y desde el político, Rusia”.

Planas se siente incapaz de dar ahora una respuesta “inequívoca” sobre cómo resolver ese dilema, pero lo que si considera es que “no deberíamos perder nunca de vista a los Balcanes”.

Y sobre todo, incide, en que hay que darles a esos países “un horizonte y una esperanza”, porque “cuando pierdes el horizonte empiezan los problemas”, dijo, y en este sentido puso el ejemplo de las negociaciones con Turquía, país con el que existe una unión aduanera desde 1962.

“Lo importante es pedalear, seguir avanzando, progresando y sobre todo no colocarse de espaldas, manteniendo no solo la mirada sino también el trabajo común y la posibilidad de evolución”, agregó Planas.

Catalina Guerrero