Nueva Delhi, 30 ago (EFE).- El primer ministro indio, Narendra Modi, comienza mañana una visita oficial a China para asistir a la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS), por primera vez en siete años, en un contexto de reajuste global.
La cita, que comenzará el domingo en la ciudad nororiental de Tianjin, reunirá a los líderes de China, Rusia, India, Irán, Pakistán y varias repúblicas centroasiáticas. Pekín la ha presentado como la cumbre de mayor envergadura desde la fundación del bloque en 2001.
Se espera que Modi mantenga reuniones bilaterales al margen de la cumbre, incluida una con el presidente chino, Xi Jinping, aunque Nueva Delhi no ha confirmado oficialmente la agenda. De producirse, sería la primera ocasión en la que ambos mandatarios se encuentran tras declarar el pasado octubre el fin del enfrentamiento fronterizo iniciado en 2020.
El Kremlin sí adelantó que el primer ministro indio se verá el 1 de septiembre con el presidente ruso, Vladímir Putin, la primera vez que ambos coinciden desde que Washington impuso un arancel del 50 % a las exportaciones indias en represalia por la compra de crudo ruso.
¿Por qué es importante este reencuentro?
El viaje de Modi se produce tras años de frialdad entre la India y China, marcada por el enfrentamiento fronterizo de 2020 en el Himalaya, en el que murieron al menos 20 soldados indios y cuatro chinos y llevó la relación bilateral a su peor momento en décadas.
En los últimos meses, ambos gobiernos han retomado el diálogo político. La semana pasada, el ministro de Exteriores chino, Wang Yi, viajó a Nueva Delhi para entregar personalmente la invitación de Xi Jinping al primer ministro indio y anunciar una serie de medidas para recomponer los lazos.
En este acercamiento,ambas potencias acordaron reabrir el comercio a través de tres pasos fronterizos en el Himalaya, reanudar los vuelos directos entre las dos naciones, suspendidos desde 2020, y facilitar la expedición de visados para turistas, empresarios y periodistas.
En el marco de una gira que incluye Japón, Modi declaró el viernes que “las relaciones estables, predecibles y constructivas entre India y China, dos de las mayores naciones del planeta, pueden tener un impacto positivo en la paz y prosperidad regional y global”, y añadió que esta cooperación es “crucial para un Asia y un mundo multipolar”.
Su relevancia en el tablero internacional
El acercamiento se produce además en un contexto internacional de alta volatilidad. Las tensiones comerciales con Estados Unidos, agudizadas por la guerra arancelaria impulsada por el presidente Donald Trump, han complicado la relación de Nueva Delhi con Washington.
Tanto Pekín como Nueva Delhi enmarcan este deshielo en una recalibración estratégica que busca reducir la dependencia del mercado estadounidense y reforzar la cooperación en Asia.
La cumbre de Tianjin, que también contará con la presencia del primer ministro paquistaní, Shehbaz Sharif, se perfila así como una plataforma clave para medir hasta dónde puede avanzar este nuevo acercamiento entre las principales potencias del continente.