El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, aseguró que la desaparición del Estado Islámico (EI) en la vecina Siria dará paso a la expansión de la influencia iraní en la región, sobre todo, a través del grupo chií libanés Hizbolá.
Netanyahu rechazó el aumento de influencia iraní en el país vecino y advirtió que el Gobierno hará “lo que sea necesario para salvaguardar la seguridad de Israel”, después de escuchar ayer las evaluaciones del director del servicio secreto exterior, Mosad, Yosi Cohen, informó hoy la radio israelí Kan.
Cohen revisó con los miembros del selecto Gabinete de Seguridad la situación en Oriente Medio y analizó las posiciones iraníes y de grupos proiraníes en Irak, Líbano, Yemen y Siria, este último país fronterizo con Israel y donde los grupos proiraníes son aliados del régimen de Damasco de Bachar Al Asad.
El máximo dirigente del servicio de espionaje exterior israelí atribuyó el éxito de Irán y sus aliados al vacío que ha dejado la lucha de las fuerzas de la coalición contra el EI.
“Israel no está vinculado de ninguna manera a los acuerdos internacionales que firmó Irán y continuará actuando con determinación y de diferentes maneras para defenderse de estas amenazas”, declaró el primer ministro, según recoge hoy el diario Israel Hayom.