Los países del Sahel deben unificar políticas contra el extremismo

Los países del Sahel deben armonizar sus políticas para combatir eficazmente la radicalización religiosa y el terrorismo, dijo hoy el ministro del Interior de Níger, Hassoumi Massaoudou, en el foro de países del G5 del Sahel.

Los ministros del Interior de los cinco países (Níger, Chad, Mauritania, Mali y Burkina Fasso) se reunieron hoy en Niamey en la última jornada de cuatro días de este foro regional convocado para tratar específicamente la cuestión del extremismo religioso.

“Ante el ascenso de la radicalización, el terrorismo y el crimen organizado, todas ellas amenazas transfronterizas, solo una puesta en común de nuestros recursos y nuestros esfuerzos puede hacernos ganar la partida”, dijo Massaoudou en la apertura de la reunión, a la que asistieron también los ministros de Interior de España, Jorge Fernández Díaz, y Francia, Bernard Cazeneuve.

La reunión de ministros del Sahel fue convocada con la intención de establecer una “hoja de ruta” para prevenir la radicalización, especialmente de la juventud, y luchar contra el terrorismo.

El ministro Cazeneuve saludó la iniciativa y subrayó la urgencia de tomar decisiones en este sentido.

El terrorismo “es una amenaza que no tiene fronteras”, dijo, y citó los atentados registrados en los últimos años en lugares tan distantes como París, Bamako, Irak, Somalia o Copenhague, entre otros.

En cuanto al Sahel, el ministro francés recordó que “es un territorio inmenso, más vasto que la Unión Europea, y que desde hace mucho tiempo se enfrenta a desafíos” de seguridad, a los que responden “con coraje y determinación”.

“Esta iniciativa inédita que habéis iniciado hace ya un año, hoy la estáis consolidando para garantizar mejor la seguridad en vuestras fronteras y proteger la vida de vuestros conciudadanos”, dijo Cazeneuve, al tiempo que prometió el apoyo total de su Gobierno a este grupo de países a los que une su pasado colonial francés y su pertenencia a la “francofonía”.