El comercio de ropa usada crece pero necesita fomentar el reciclaje

España exportó 59.725.527 millones de kilos de ropa usada en 2018, casi diez millones de kilos más que el año anterior, siendo el país que más crece exponencialmente en estas exportaciones en la Unión Europea, sin embargo, hacen falta leyes para potenciar el reciclaje.

Así lo señala la Asociación Ibérica de Reciclaje de Textil (Asirtex) en el informe 'El comercio internacional de ropa usada en España' hecho público en el marco de la celebración, este viernes, del Día Mundial del Reciclaje, según un comunicado.

Según Asirtex, asociación empresarial del sector de reciclaje textil que trabaja en España y Portugal, en 2018 España exportó 59.725.527 kilos de ropa principalmente a Togo, Emiratos Árabes, India, Pakistán, y Chile, Cuba y República Dominicana en Latinoamérica.

En 2017, las exportaciones españolas a Europa tuvieron como destino principal Portugal con 278.484 kilogramos.

Ese mismo año, Alemania exportó 512.893.034 kilos, Reino Unido 371.319.327 kilos, Bélgica 182.379.553 kilos y Francia 155.176.818 kilos.

La Comunidad Valenciana (41.5 %), Cataluña (22,40 %) y Madrid (11,20 %) son las comunidades autónomas que más ropa usada mueven en España.

Asirtex señala que la falta de leyes sobre el tratamiento de ropa usada, con un Sistema Colectivo de Responsabilidad Ampliada del Productor (SCRAP), son algunos de los factores a fortalecer en el sector.

A estos puntos se suman la necesidad del fomento del eco-diseño y del consumo responsable de la moda.

Además, la asociación textil cuestiona la existencia de un millón de toneladas de residuos textiles en vertederos en España y el tratamiento a aplicar sobre los mimos tras su separación.

Por ello, Asirtex recuerda la “imperiosa necesidad de trabajar en soluciones reales y efectivas que posibiliten el reciclaje textil de las ingentes cantidades de toneladas de ropa y calzado usado que se genera en España”.

Asirtex aglutina a compañías recuperadoras y recicladores de materiales textiles, recogedores y clasificadores de ropa usada y productores de trapos de limpieza comprometidas con la sostenibilidad, el medioambiente, la lucha contra el cambio climático y la responsabilidad social empresarial, preocupadas por la economía circular.

La normativa europea establece que en 2020 el reciclaje del textil debe alcanzar el 50 %, sin embargo, solo se recupera una de cada diez prendas desechadas anualmente, ha informado la organización Humana Fundación Pueblo para Pueblo en un comunicado.

Según la organización que trabaja desde 1987 en la reutilización del textil y “lleva a cabo programas de cooperación al desarrollo en África, América Latina y Asía así como en España”, instalar más contenedores en la vía pública es la medida más urgente para evitar que cada año 900.000 toneladas de ropa acaben inutilizadas en vertederos.

La gran parte de las prendas que desechamos son susceptibles de tener una segunda vida, según Humana, sin embargo, apena un 10 % se recupera selectivamente por un gestor autorizado para promover su reutilización o reciclado.

El residuo textil es la quinta fracción que más se genera (tras la orgánica, los envases y plásticos, el papel y el cartón y el vidrio), y la que presenta el porcentaje de valorización más alto, por encima del 90 %, según Humana.