El origen del Oktoberfest, la fiesta más conocida de Alemania: de una boda real a celebración con la cerveza como protagonista

Andrea Blez

18 de septiembre de 2025 18:03 h

0

Este sábado 20 de septiembre, la ciudad de Múnich da la bienvenida oficial a otra nueva edición del Oktoberfest, la fiesta más conocida de Alemania y su celebración más internacional, que está relacionada con la cerveza en muchos casos y que durará de forma oficial hasta el domingo 5 de octubre en la plaza Theresienwiese de la capital de Baviera, en el sur del país.

El Oktoberfest nació en las celebraciones de una boda origen

El origen del Oktoberfest se sitúa en el 17 de octubre de 1810 como parte de las celebraciones del matrimonio entre el rey Luis I de Baviera y la princesa Teresa de Sajonia-Hildburghausen, en la que tuvo lugar una gran carrera de caballos en un prado, que entonces estaba a las afueras de la ciudad de Múnich y que recibió su nombre actual, Theresienwiese debido al nombre de la novia.

Las celebraciones que se crearon por toda la ciudad y por Baviera durante la boda real del rey Luis I siguieron teniendo lugar como una tradición que se extendió a partir del año siguiente, en 1811, cuando la continuó la Asociación de Agricultura de Baviera, que lo vio como una buena oportunidad para vender sus logros agrarios.

Sin embargo, a pesar de la buena acogida, tan solo unos años después, en 1813 se canceló debido a las guerras napoleónicas, siendo su primera cancelación, pero que no sería la única durante su larga historia que ahora se extiende a más de dos siglos y que sería desde 1819 que lo organizaría la ciudad de Múnich después de haber tenido financiación privada.

Curiosidades del Oktoberfest: sus cancelaciones, momentos más oscuros y hasta quedarse sin cerveza

A lo largo de los más de 200 años del Oktoberfest han sucedido multitud de guerras y pandemias que han obligado a su cancelación, como fue durante la Primera Guerra Mundial, la Segunda Guerra Mundial o las pandemias de peste, gripe o covid-19.

En 1980, el Oktoberfest vivió uno de sus momentos más oscuros y tristes con el atentado de extrema derecha con una bomba que tuvo lugar en el recinto, que mató a 12 personas e hirió más de 200 el 26 de septiembre de ese año, siendo uno de los peores actos que han sucedido en la entonces República Federal de Alemania, que se recuerda con una placa en el Theresienwiese.

Al año siguiente, en 1981, ocurrió uno de los hechos más anecdóticos de la fiesta y que ha dado a una de las tradiciones más curiosas, cuando en la carpa de la mítica cervecería Hofbräu se quedaron sin bebida y tuvieron que pedir al vecino, Paulaner, que desde entonces se sirve durante algunas horas como conmemoración de ese hecho.