El cormorán y el meloncillo: cazadores piden poder cazar estas especies en la región
La Asociación de Productores de Caza ha pedido que el cormorán grande y el meloncillo se incorporen al catálogo de especies cinegéticas de Castilla-La Mancha, considerándolos “especies exóticas invasoras”, lo que llevaría a hacer un Real Decreto que estipule cómo acabar con esos animales. Actualmente estos animales estaban catalogados como “de interés especial”, aunque el cormorán ya ha dejado de serlo, pidiendo que el meloncillo también deje de serlo. La caza de estos dos animales está prohibida actualmente.
La petición la hizo la asociación de cazadores en la reunión del Consejo Provincial de Caza de Toledo, una reunión celebrada hace quince días en la que como denunció Ecologistas en Acción no se contaba con la documentación necesaria para valorar la última campaña de caza, el estado de las distintas especies en la región y a la que llegó a última hora la memoria de la reunión del año pasado.
El meloncillo es una especia familia del tejón (también conocido como mangosta común) que en toda España está como introducido, no como nativo (procede de África). El motivo de los cazadores para querer acabar con este animal es que su principal presa son las liebres y las perdices, por lo que en España y especialmente en Castilla-La Mancha y Andalucía se ha incrementado su cantidad. Comparte presas con el zorro o el lince, e incluso algunos ganaderos se quejan de que estos animales crean daños a sus animales, si bien no es habitual que las mangostas ataquen a animales tan grandes.
Más sorprende la petición del cormorán grande en Castilla-La Mancha. Estas aves son autóctonas de España (prácticamente en todo el mundo se pueden encontrar diversas subespecies) y se dan solo en zonas acuáticas; de hecho comen pescado. En este punto la petición viene lanzada por pescadores intensivos que critican que este animal interfiere con su actividad. No obstante este animal no es reintroducido en España sino que como en todo el mundo es una de las aves acuáticas más comunes del país. Actualmente la caza de esta ave solo se permite en la Comunidad Valenciana. En Castilla-La Mancha este animal es mucho más raro pudiéndose encontrar en las zonas estancadas de Ruidera, Tablas de Daimiel, pantanos de Entrepeñas y Buendía o del Pago del Vicario. La mayoría de estos animales en la región viven en Parques Naturales.
Aunque estos animales dejen de ser especies “de interés especial”, ello no quiere decir que sean cinegéticas (que se puedan cazar). El régimen general de protección mantiene aún a estos animales (el meloncillo sigue siendo de interés especial, aunque se ha presentado la petición para que deje de serlo). En Extremadura ya ha comenzado la caza del meloncillo por ser un depredador de especies comunes autóctonas.
Colectivos ecologistas se quejan de que no se ha presentado ningún informe técnico ni científico que demuestre por qué hay que cambiar el estatus de estos animales. Los daños que dicen algunas personas sufrir por el meloncillo no están presentados ni comprobados. Por el cormorán grande no existen daños registrados directamente por su escasa incidencia en Castilla-La Mancha y su ecosistema.
Estos animales, en las leyes estatales, están considerados autóctonos.
