Garrigues y AENOR presentan el manual 'Principios, prácticas y beneficios de la responsabilidad social'

Esta norma, elaborada por la Organización Internacional de Normalización (ISO, por sus siglas en inglés), es “el primer estándar global de desarrollo sostenible” desde un punto de vista social, medioambiental y económico, en palabras de la miembro del Swedish Standards Institute Kristina Sandberg, que ahora es secretaria del ISO 2600 PPO (del inglés 'Post Publication Organization').

En concreto, la 'ISO 26000' establece unas líneas básicas para que empresas y organizaciones de todo el mundo puedan implantar la Responsabilidad Social (RS) y, de momento, no tiene un propósito de certificación. El texto incluye siete principios, que, su vez, enlazan con siete materias fundamentales, que dan pie a 37 asuntos y a 400 acciones.

A juicio de Villaseñor, la norma ha aportado un “gran conocimiento” pero es “de difícil manejo”. Por ello, junto con el socio de Garrigues Jesús de la Morena, ha coordinado un equipo de 18 personas, que ha intentado simplificarla en un manual. “Es un producto redondo”, ha indicado De la Morena.

Así, el primer capítulo de 'Principios, prácticas y beneficios de la responsabilidad social' está dedicado a la gestación de la norma 'ISO 26000'; mientras que el segundo agrupa los siete principios de esta en dos “pilares fundamentales”, que son la identificación de los grupos de interés y el cumplimiento de la “normativa internacional de comportamiento”.

A continuación, el tercer capítulo desgrana algunas recomendaciones para introducir la RS en la empresa; el cuarto recopila herramientas, que ahora están en el mercado, para hacerlo; y el quinto expone los beneficios que estas prácticas aportan a las organizaciones.

Durante la presentación, también han intervenido el socio de Garrigues Antonio Baena y el director general de AENOR, Avelino Brito. Este ha asegurado que la RS es “algo necesario” en el sentido de que la actividad económica tiene que tener una “dimensión social más definida”, ya que “el mundo se ha quedado pequeño”. “Además, es una extraordinaria oportunidad económica porque ha cambiado la conciencia social de los consumidores, de los ciudadanos”, ha añadido.

Asimismo, ha estado presente el director general de Trabajo Autónomo, de la Economía Social y de la Responsabilidad Social de las Empresas, Miguel Ángel García, que ha afirmado que si durante la crisis “se hubieran aplicado de forma más contundente y con mayor decisión los valores propios de la Responsabilidad Social de las Empresas”, se habría podido “minimizar algunas de sus consecuencias”.