El Mercosur y la UE pisan el acelerador para lograr un acuerdo antes de fin de año

El Mercosur y la Unión Europea trabajan de forma activa para lograr un acuerdo “antes de fin de año”, aunque ambas partes admitieron hoy en Brasilia que la recta final de las negociaciones, que comenzaron hace dos décadas, no está exenta de obstáculos.

“Cuanto más cerca estamos del final del proceso negociador, más difíciles se tornan los temas a discutir, de ahí la importancia del componente político, que agrega tanto valor al proceso de negociación”, dijo el vicepresidente de la Comisión Europea, Jyrki Katainen, que participó en Brasilia en una reunión con los cancilleres del Mercosur.

“Estamos muy cerca de alcanzar con éxito un nuevo acuerdo entre el Mercosur y la UE”, insistió Katainen en una declaración en la que se refirió al umbral de final de año como un plazo posible para cerrar el pacto.

“Si conseguimos concluir con éxito las negociaciones en curso a final de año, el primer resultado inmediato será el crecimiento de la confianza de los inversores” y “la oportunidad de intercambio comercial más sustentable”, añadió el exprimer ministro de Finlandia (2011-2014).

“En una coyuntura en la que en otras partes otros parecen estar fomentando la guerra, nosotros estamos construyendo puentes”, dijo.

También el canciller brasileño, Aloysio Nunes, se mostró “optimista” sobre el acuerdo.

“Si tuviéramos una señal positiva de la UE, como espero que tengamos, podríamos acelerar las negociaciones y concluirlas a final de año”, afirmó.

“Estamos muy optimistas sobre un proceso que además de ser importante para nosotros es una señal positiva para el mundo”, añadió el canciller, que destacó “la importancia del multilateralismo y del intercambio económico sujeto a reglas equilibradas”.

“Fuimos unánimes en afirmar que este entendimiento tiene una enorme relevancia económica en el plano comercial y de inversiones, e incluye temas que van mas allá del intercambio de bienes”, apuntó.

El ministro brasileño recordó que el Mercosur ha venido trabajando “mucho” en el último año para “eliminar una serie de barreras, no solo tarifarias”, para acercarse al acuerdo con la UE y abrirse a otros bloques con el propósito de “retomar su dinamismo”.

“Mercosur se mueve”, dijo el canciller de Brasil, el país que ocupa la presidencia de turno del Mercosur, integrado además por Argentina, Uruguay y Paraguay.

Para el titular argentino de Exteriores, Jorge Faurie, cerrar el acuerdo este año constituiría “una señal extremadamente fuerte para el Mercosur en sí mismo, para la UE y también para el mundo en general”.

Además, consideró que la negociación con la UE “nos hace trabajar para profundizar dentro del Mercosur muchos compromisos que hemos asumido a lo largo de nuestra historia y que tienen que alcanzar una fase de modernidad”.

El uruguayo Rodolfo Nin Novoa opinó: “nunca estuvimos tan cerca de firmar este acuerdo”, pero insistió en que, además de reglas, números y listas, “también tenemos que hablar de comercio justo”.

“El comercio tiene que satisfacer las expectativas que tenemos desde hace mas de 20 años, lo que no puede pasar es que la gente de nuestros países se pregunte ¿tantos años para esto? Esto no va a pasar”, sentenció.

Al encuentro de Brasilia asistió también el viceministro de exteriores de Paraguay, Oscar Cabello, quien subrayó que las negociaciones se desarrollan en un “tren de igualdad” y con la perspectiva de “rechazar las barreras proteccionistas que afloran aquí y allá en el mundo”.

El Mercosur y la Unión Europea comenzaron las negociaciones de un acuerdo de asociación y libre comercio en 2000, pero las diferencias políticas se impusieron y cuatro años después se abandonaron las conversaciones, que se retomaron en 2010.