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Salud formaliza la derivación de ecografías de Atención Primaria a clínicas privadas

Uno de los accesos al Hospital de Navarra.

Celia Bustamante

El Servicio Navarro de Salud sigue privatizando servicios. Esta vez, las ecografías que se solicitan desde los médicos de los centros de salud. De esta manera, el departamento liderado por Marta Vera da forma a un contrato mediante el cual, la empresa que ofrezca un precio más barato será la encargada de realizar 14.000 de las ecografías solicitadas. Una situación que se produce mientras, según fuentes sindicales, ecógrafos del Complejo Hospitalario permanecen cerrados por las tardes por falta de personal.

El último año se han producido varias oleadas de derivaciones de ecografías a centros privados, sobre todo desde el Hospital Reina Sofía de Tudela y el García Orcoyen de Estella debido a que la lista de espera estaba cerca de rebasar los plazos permitidos en la ley de garantías. Dentro del último lote de servicios sanitarios subastados en junio del año pasado, estaban incluidas 1.150 ecografías, que parecen no haber sido suficientes. En este caso, las ecografías privatizadas responden únicamente a las solicitadas por los médicos de los centros de salud, no las que se tengan que realizar en el Complejo Hospitalario a paciente que ya estén ingresados o acudan a urgencias.

El Gobierno de Navarra, de momento, no facilita datos sobre el volumen de ecografías que se realizan desde atención primaria cada año, ni el número de personas que engrosan la lista de espera. En el pliego de condiciones publicado por el departamento, no se hace referencia específica a qué ecografías se van a derivar al centro privado que ofrezca un mejor precio, si son todas las de atención primaria o solo algún tipo concreto, ni si se derivará para desahogar la lista de espera o de forma sistemática. Sí es cierto que el contrato establece 14.000 ecografías para 2015, cifra que aumentará en 2016 y 2017, por lo que el gobierno no prevé que sirva para reducir el número de pacientes que esperan, sino aumentar progresivamente la actividad que se deriva a centros privados.

Confidencialidad y calidad del servicio

El protocolo de comunicación entre el médico del servicio público y el privado, se realizará, en primera instancia, mediante la historia clínica informatizada del paciente, en la que ambos comparten la información relacionada con la prueba. Además, el contrato recoge que en caso de un hallazgo importante, el médico del centro privado se pondrá en contacto con el de atención primaria y que, de nuevo, y en todo caso, el médico del centro privado tendrá que incluir esa comunicación en la historia del paciente. Del mismo modo que en el caso de las valoraciones económicas de la dependencia, se facilita que una empresa privada tenga acceso a información confidencial del paciente.

Respecto a la formación del personal, Salud solicita que el encargado de realizar las radiografías cuente con la formación necesaria, y con dos años de experiencia. Criterios inferiores de los que poseen los profesionales del servicio navarro de salud que han tenido que acceder a su puesto tras una oposición y varios años de experiencia.

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