Farage busca calmar polémica sobre rumanos y dice que serían buenos vecinos

El líder del Partido de Independencia del Reino Unido (UKIP), Nigel Farage, intentó calmar hoy el malestar causado por unos comentarios negativos sobre los rumanos al afirmar que serían “buenos vecinos” y que su formación no es racista.

El UKIP publicó hoy un aviso a toda página en el diario “The Daily Telegraph” en el que insiste en que no es racista y que quiere terminar con la discriminación contra los no europeos.

En unas declaraciones el viernes a la radio londinense LBC, Farage dijo que si una persona vive en Londres estaría preocupada si “un grupo de hombres rumanos se mudan” al lado de casa y añadió que muchos inmigrantes se ven “forzados a una vida de crimen”.

Su opinión provocó fuertes críticas, lo que obligó después a Farage a retractarse y achacar sus comentarios al cansancio.

En el aviso publicado hoy, que tiene forma de carta abierta, Farage afirma que “el UKIP no es un partido racista, y nuestra política de inmigración, lejos de ser racista, tiene como objetivo terminar la discriminación contra los no europeos”.

“La gran mayoría de los rumanos que vienen al Reino Unido desean mejorar su vida y serían buenos vecinos”, añade Farage, y resalta los problemas que ha tenido Rumanía para completar la transición hacia una democracia occidental tras la dictadura de Nicolae Ceausescu, derrocado en diciembre de 1989.

Farage agregó que hubo discriminación contra la minoría romaní y un “gran problema” por el crecimiento de grupos criminales.

El aviso añade que las leyes europeas sobre libre movimiento de personas le impide al Reino Unido frenar la entrada de esos grupos, por lo que está a favor de la salida de su país de la UE.

“No deberíamos estar en una unión política con Rumanía, con una puerta abierta a todos sus ciudadanos”, afirma Farage, opuesto a las leyes comunitarias que permiten desde el pasado 1 de enero que rumanos y búlgaros puedan trabajar en la Unión.

Este aviso sale publicado días antes de la celebración de las elecciones europeas y las locales en Inglaterra.

El UKIP es un partido minoritario y populista que tiene fuertes políticas antieuropeas y contrarias a la inmigración, pero avanza en los sondeos sobre intención de voto de cara a los comicios.

El UKIP de Farage, que en 2009 obtuvo 13 eurodiputados pero no tiene ningún escaño en la Cámara de los Comunes, es el principal rival de los conservadores del primer ministro David Cameron en las elecciones de este mes.