Garicano (C's) cree que PP y PSOE deberían llegar a un pacto educativo que perdure durante al menos una generación

“Deberían estar por la labor (PP y PSOE) aunque entendemos que va a haber mucha resistencia y que esto no va a ser fácil”, ha insistido Garicano, quien ha hecho un llamamiento a los dos “partidos antiguos” para que se sumen el pacto por la educación que pretende liderar Ciudadanos en una apuesta por el talento frente a la tradicional “política de amiguetes”.

Garicano se ha mostrado convencido de que el PP debería “estar deseoso” y tener “cierta urgencia” para llegar a ese pacto por la educación ante el “catastrófico” resultado de la Ley Wert con aplicación diferente en las distintas comunidades autónomas. Asimismo, ha recordado a los socialistas que tampoco pueden estar satisfechos del resultado de sus cinco reformas educativas.

El coordinador del programa económico de Ciudadanos ha abogado por volcar “toda la acción de Gobierno” en la educación, una cuestión “absolutamente crucial” en la propuesta del partido que lidera Albert Rivera para cambiar el rumbo del país para que afronte de nuevo “un proyecto nacional e ilusionante”.

En el mismo sentido se ha pronunciado el candidato de C's al Congreso por Valladolid, Francisco Igea, para quien si hay un partido capaz de alcanzar un pacto en educación es “sin duda” Ciudadanos por lo que ha abogado por evitar “sectarismos” y debates sobre asuntos como la asignatura de la religión para analizar la situación de partida y poner medidas sobre la mesa para mejorar los resultados.

Garicano apuesta también por cambiar el modelo de relaciones laborales y por regenerar la vida pública con la eliminación de la “partitocracia” a la que se ha referido como un “verdadero ejército de ocupación” ya que, en su opinión, la denominada vieja política suele dejar muy poco espacio para lo que no es política.

El coordinador del programa económico de Ciudadanos se ha mostrado convencido también de que las cosas se están moviendo “en la mejor dirección” para los intereses de su partido que, según ha continuado, está llegando y quiere llegar cada día a más gente ante el “enorme deseo de cambio” que ve en la sociedad española. “Creemos que podemos llegar a ganar las elecciones”, ha defendido a este respecto.

Entre las recetas de futuro del economista vallisoletano está la apuesta por el talento y por atraer a la “gente de primera línea” frente a la política del ladrillo que, según ha lamentado, dejó a un lado la inversión en los cerebros y en capital humano con el resultado de “maravillosos” edificios en parques tecnológicos que luego quedaron vacíos.

También ha descartado hacer una política industrial al uso sobre sectores como la automoción o el turismo para defender las mismas reglas de juego para todo el país con la base de ese mejor sistema educativo que proclama Ciudadanos para atraer empresas a través del talento. Su reto concreto es situar a España entre uno de los diez mejores lugares para hacer negocio.

El coordinador del programa económico de Ciudadanos ha cifrado en un 20 por ciento del PIB el peso de la corrupción y del 'capitalismo de amiguetes' ya que, según ha advertido, más allá del problema moral de las comisiones y de los maletines está el asunto de que el que se lleva el contrato por ese sistema no es el más capacitado.