Juan Mayorga copa la cartelera teatral de la nueva temporada

El dramaturgo Juan Mayorga será en los próximos meses “el hombre de moda” teatral, porque a la recuperación en Madrid de “Hécuba”, “El chico de la última fila”, “La lengua en pedazos”, “El arte de la entrevista” y “La vida es sueño” se sumarán en Barcelona “El crítico” y “El enemigo del pueblo”.

“Tengo suerte, sí, pero es casualidad. Son coincidencias que ocurren muy de vez en vez, si es que ocurren”, admite modesto en declaraciones a Efe el flamante premio nacional de literatura dramática (Madrid, 1965).

La próxima semana se estrenarán en el Teatre Borràs de Barcelona su obra “El crítico”, dirigida por Juan José Alonso e interpretada por Juanjo Puigcorbé y Pere Ponce, y en el Lliure, la adaptación que ha hecho de “El enemigo del pueblo”, de Henrik Ibsen, dirigida por Miguel del Arco y con Pere Arquillué al frente del reparto.

Acaba de estrenar en Avilés su texto “El arte de la entrevista”, con Alicia Hermida y Luisa Martín, una obra que aterriza el 21 de febrero en el María Guerrero de Madrid, y luego, en abril, volverá, al Teatro Fernán Gómez, “La lengua en pedazos”, la que fue su debut en la dirección.

El 6 de febrero se estrenará en el Español sus adaptaciones de “Hécuba”, de Eurípides, dirigida por José Carlos Plaza y con Concha Velasco de protagonista, y el 19 de marzo en el Teatro Pavón “La vida es sueño”, de Calderón de la Barca, dirigida por Helena Pimenta y Blanca Portillo como Segismundo.

Por si eso fuera poco, este doctor en Filosofía y licenciado en Matemáticas está trabajando en la que será su segunda experiencia como director, un texto también suyo, “Reikiavik”, que cuenta el campeonato mundial de ajedrez de 1972, la partida que enfrentó a Bobby Fischer y a Boris Spassky, interpretados por Ramón Barea y Edu Soto, que es “una miniatura de la guerra fría”.

A partir de mañana, el Teatro Galileo de Madrid recupera su texto “El chico de la última fila”, representada en esta ocasión por la compañía La fila de al lado y dirigida por Víctor Velasco, con Óscar Nieto y Miguel Lago en los papeles principales.

“Este montaje -el primero fue estrenado en 2006 por la compañía Ur Teatro y dirigida por Helena Pimenta- nació casi en la clandestinidad y con una extraordinaria modesta. Me invitaron a ver el montaje en un edificio de la calle Embajadores de Madrid ; acudí pensando que iba a ser uno de tantos y me encontré un espectáculo excelente con una dirección muy imaginativa”, recuerda.

Es una versión, explica, que se centra en la imaginación, que invita al espectador a inventar espacios y tiempos “y lo hace una compañía que no es un agregado de actores sino profesionales en permanente escucha los unos a los otros”, alaba.

Velasco ha pedido a sus actores que siempre estén todos en escena, para que el público vea varios planos de la acción y sea el espectador “el que elija qué punto de vista le atrae más”, apunta Mayorga.

“Es una obra que se ha hecho en muchos sitios y en todas partes conecta, y el público la recoge como una historia propia”, dice de “El chico de la última fila”, adaptada al cine por François Ozon con el título “Dans la maison”, Concha de Oro a la mejor película y Premio al mejor guión en el Festival de Cine de San Sebastián 2012.

En la actualidad, se está ensayando un montaje argentino, el mexicano se encuentra en preparación y el alemán será estrenado en el Festival de Wiesbaden.

“Es una obra que me ha dado muchas alegrías, que me las sigue dando y parece que me las dará”, añade feliz.