Luchas internas y recelos sobre Podemos empañan las primarias de IU en Madrid

Una brecha interna agravada por la polémica sobre el caso de las tarjetas opacas de Caja Madrid e informaciones sobre supuestas irregularidades, más las denuncias de que “intrusos” de Podemos se han infiltrado en el proceso, han ensombrecido la recta final de las primarias de IU en Madrid.

El proceso interno que finaliza el próximo domingo con la votación de más de 13.000 afiliados y simpatizantes se ha desarrollado en un contexto complicado por el enfrentamiento entre la dirección federal y territorial y las encuestas que pronostican el auge de Podemos a costa, entre otros, de IU.

Hasta seis aspirantes, divididos en tres parejas -un precandidato para Comunidad y otro para Ayuntamiento de Madrid-, pelean por ser candidato, o quizá para presentarse a un nuevo proceso de primarias, porque precisamente uno de los ejes de debate es el papel que debe tener IU en los procesos de convergencia de la izquierda que se están forjando en Madrid -Ganemos Madrid- y su relación con Podemos.

Porque aunque la dirección territorial de IU en la Comunidad de Madrid abrió hace meses de forma oficial los contactos para concurrir en las municipales en la plataforma Ganemos Madrid, los recelos de parte de la militancia y de los aspirantes a esta posibilidad se han evidenciado en las últimas semanas.

Defienden abiertamente la “convergencia” de IU con otras fuerzas y a todos los niveles los diputados regionales Tania Sánchez (Comunidad) y Mauricio Valiente (Ayuntamiento), que se presentan juntos y han denunciado que la dirección de IU en Madrid quiere impedir de forma irregular la inscripción de miles de simpatizantes a los que acusan de ser “intrusos” de Podemos.

Frente a ellos, han advertido que este proceso de unión con otras fuerzas podría “diluir” la identidad de IU el tándem formado por el abogado José Antonio Moreno y la concejal en el Ayuntamiento de Madrid Raquel López -aspirantes a la Comunidad y al Consistorio-, que sus adversarios identifican con la actual dirección territorial.

El tercer tándem en liza, conformado por el miembros de Consejo Político Federal Julián Sánchez-Vizcaíno y la diputada regional Lali Vaquero, defienden también la continuidad en solitario de la 'marca IU'.

A esta tensión política en relación a la estrategia electoral de la formación se ha unido un intercambio de acusaciones internas enmarcado en el enfrentamiento entre la dirección federal y regional de IU por la asunción de responsabilidades por el caso de las tarjetas opacas de Caja Madrid.

Porque tras apoyar Tania Sánchez la petición de dimisión de los últimos cinco coordinadores generales de la cúpula madrileña formulada por la Presidencia federal, la dirección madrileña de IU anunció ayer que convocaba para hoy a la diputada.

¿Para qué? Pues para que dé explicaciones sobre las últimas informaciones que apuntan a posibles irregularidades cometidas por Sánchez durante su etapa en el Ayuntamiento de Rivas Vaciamadrid -la mayor ciudad gobernada por IU en España-, que ella ha negado, por estar “en juego” la “credibilidad de Izquierda Unida”.

Y, tras las denuncias de varios portavoces sobre la detección de “miembros conocidos” de otras fuerzas e “intrusos” entre los simpatizantes, la dirección anunció ayer que la votación del domingo dispondrá urnas diferenciadas para militantes y simpatizantes, lo que a juicio de Tania Sánchez supone cambiar las reglas de juego “a mitad de partido”.